Sector Trail Almería
18/10/2009
"El ocho de Gádor"

7.30 am. Suena el despertador. Al lado, unas llaves con el diapasón me animan a abandonar el sobre, mientras, las primeras luces del día intentar colarse por las rendijas de la persiana. Una ducha rápida y un café terminan de desperezarme.

Abajo en la cochera ya está todo preparado. Un cigarro se consume mientras me enfundo meticulosamente el traje de guerrero. De fondo, el sonido ronco de mi monocilíndrico.
Hacía tiempo que no experimentaba estas sensaciones debido a la lesión en mi hombro meses atrás y las -hasta ahora- contenidas ganas de trail, fluían por todo el cuerpo, en una mezcla de incertidumbre y excitación.

El sonido ronco se torna en un runruneo celestial que me invita a iniciar la marcha. A pesar de que el sol todavía no ha despuntado, la claridad y la luz anuncian una jornada climatológicamente perfecta.
8.30am. Llego a al lugar habitual de encuentro, ese lugar del que parten nuestras aventuras y, por qué no…, nuestros sueños. Es la puerta de nuestro particular balneario de tranquilidad, donde dejamos de lado nuestras cargas y obligaciones por unas horas.
Lleno el depósito y espero a mis compañeros. Mientras, me entretengo toqueteando el GPS para cargar el track de la ruta que termine de hacer la noche anterior.

Poco a poco van llegando.



Motoruge, Magustin78, Freewind, Claudio990 y Marmota. Los últimos cuatro… nuestros aventureros que pronto nos contarán su viaje por Marruecos y que todavía parece que siguen con ganas de trail ;-) TioDeLaVara al final se cae de la lista. Un abrazo tío, nos vemos en la siguiente!

Tras repostar y charlar brevemente, emprendemos la marcha hacia Benahadux, desde donde cogeremos una pista con algún tramo de carretera rota.







Enseguida llegamos a “La Puente”, como se conoce en la zona. Se trata de una reconstrucción de un puente romano del siglo XVIII que había en la misma ubicación. El puente formaba parte de la vía romana que unía Castulo (lo que hoy podría considerarse como Linares), con Urci (Almería). Más tarde serviría como camino de uso para las explotaciones de las minas de Gador.











Una belleza… tan cercana y desconocida…

Después de las fotos y cigarrito de rigor, proseguimos ruta en dirección a Enix.



Por el camino pasamos por el lugar donde estuvimos viendo las Perseidas este agosto. Por ahí fue Manusete con su RR…



Los imponentes molinos flanqueaban nuestro camino.





Breve parada a contemplar las vistas.



Esto no acaba más que empezar. Atravesaremos…



…cultivos…



…monte bajo…







…bosques de pino…





…y carreteras rotas…



Incluso, nos aventuraremos a tomar algún atajo no previsto… por una especie de cortafuegos, para alcanzar el camino. El trail se convirtió en trial ;-)



Y cuando llegamos junto al camino, resulta que había que subir un “pequeño escalón”. Todo ello aderezado con un terreno esponjoso de acículas de pino y tierra suelta, que no colaboraban mucho a traccionar la moto. Dos compañeros se lanzaron elegantemente a recoger setas y el resto, a duras penas salvamos la gravedad y las inercias de nuestras vacaburras. Adrenalina y trail.



Paradita de rigor para comentar la jugada. Risas.



Poco después, en Canjáyar, desayuno/bocata para reponer fuerzas.





Pero todavía queda mucho camino por recorrer. Y el promotor de la ruta, motoruge, también conocido como “el pastor”, pronto reunió al rebaño para reemprender la marcha. “Terminar ya!! Que sus deis vida, que nos vamos!!!!” ?



No tardamos en reemprender la marcha por la pista de Barjalí, Las Hermanicas…





y volver a pistas, caminos, carriles,… a disfrutar!!













Con alguna que otra paradita…





.. y más trail…











Siempre rodeados de estupendos paisajes y de mejores compañeros.









Con el buen día que hacía, La Fuente Alta estaba bastante concurrida: excursionistas, domingueros, ciclistas…





Excelentes vistas desde allí.



Allí les dejamos. Y comenzamos nuestro descenso hacía Dalías. Las vacaburras bajaban por donde ellas querían… nosotros éramos simples pasajeros . Enseguida alcanzamos la pista principal.





Estas dos fotos me encantan…





Parada para foto de grupo. De fondo, vestigios de la intensa actividad minera que hubo en la zona.







Llegamos a Dalias. Nos espera un Buffet libre en Casa Amalia (15 € por barba). El típico sitio que si te lo propones puedes salir con los pies por delante de tanto comer. Algunos, del hambre que tenían, no miran ni a la cámara… jejeje





Alguno se metió 4 platos… con sus cervezas y su postre… Y , claro, luego no estábamos con muchas ganas de subir en moto. Pero bueno, hicimos un “esfuerzo”, confiando en que nuestros monocilíndricos ayudaran a hacer la digestión…



El camino se hace al andar…



Y después de un breve enlace por carretera hasta Castala y parada a repostar...

…enseguida empezamos otra vez lo bueno…





..siempre empapados de naturaleza y paisajes. A nuestro alrededor, desperdigadas por la sierra, se salpican las diferentes explotaciones mineras de Castala: minas de plomo construidas en 1959, hoy abandonadas.









Fotos de grupo y montura…







Y todavía más…!!! Seguimos camino hacia Enix, para así completar el “ocho” por la Sierra de Gador.



Esta foto también me gusta un montón…









Allí, desde las alturas, a 2100 metros sobre el nivel del mar, con unas vistas espectaculares, el tiempo se detiene. Sin embargo, el sol ya está cayendo y no podemos demorarnos.









Volvemos al eje central del “ocho”: la Balsa de la Chanata.





Y de allí, a Enix.







Por último, lavado de motos en la gasolinera de la entrada a Roquetas, y despedida.



La ruta ha sido espectacular, en todos los sentidos. 250 km de ruta (450 km de emociones jejeje), casi 7 horas sobre la moto, 10 horas de ruta en total…





Aunque son sólo cifras… que no pueden explicar ni cuantificar las sensaciones vividas.

¡¡¡Nos vemos en la próxima!!! , que ya está en marcha…

Ruta: motoruge
Fotografía: magustin78
Crónica: pelusus