Otro de los sitios que tenía apuntado visitar hace tiempo. Pensé que sería en esquis, pero al final ha sido primero en moto
El calor pega fuerte, y se agradece un poco de sombra y frescor
Seguimos por una pista en la que disfrutamos como enanos. Yo quería seguir por pistas, pero ya no da tiempo si queremos llegar sin agobios a una hora prudente.
Tras un buen trecho de carretera llegamos a uno de los pueblos más conocidos de España, gracias a la loteria
Y Kitxi recuerda que aquí compró su BMW
Repostamos, hacemos un poco de pisteo, y al fin, tras no sé cuantos kilómetros y cruzar medio Pirineo, ¡llegamos!
En el campo base nos reciben Fazer, Nina, Tacos y Joanadventur, y gracias a Joan ya estaba montada la tienda en la que dormiríamos los tres.
Tacos intenta convencerme sin éxito de que esa tienda es de su talla...
Y poco a poco van llegando los demás expedicionarios, algunos conocidos, otros no, con los que intentaríamos hacer cumbre al día siguiente.
Durante la noche, algunos aprovechan para probar materiales que les permitan mejorar el rendimiento para hacer cumbre.
Unos se dedican a probar bebidas isotónicas de distintos colores y sabores...
Kitxi y yo por falta de espacio en el equipaje no pudimos colaborar llevando algunas isotónicas, pero los que llevaron compartieron generosamente con los demás las suyas.
Otros, a falta de oxígeno artificial para el ataque a cumbre, prueban a inhalar diferentes tipos de sustancias, quizá para aumentar la capacidad pulmonar....
Posiblemente alguno se excedió con las pruebas, o quizá la mezcla de ambas cosas dió como resultado que alguno tuviera extraños ataques de risa o acabara por los suelos.
También puede ser que fuera por el mal de altura por la falta de aclimatación de algún expedicionario...
Finalmente y más tarde de lo aconsejable, nos fuimos retirando a descansar.
Y digo descansar y no dormir porque yo no pegué ojo, seguramente el mal de altura afectaba la capacidad pulmonar de algún expedicionario de alguna tienda cercana, que juro que pegaba unos ronquidos tan tremendos que, a pesar de que yo estaba con tapones, pensaba que el que roncaba así estaba dentro de mi tienda...
A la mañana siguiente, para el ataque a cumbre, nos dividen en grupos, cada uno dirigido por un sherpa.
A mi me corresponde el grupo del sherpa Carlber, que aquí está ajustando su cámara de casco, y se ganó el cielo con el grupo que le tocó.
A estas alturas ya tendrá casi terminado su libro "hacer de guía y la madre que los parió" ja, ja ,ja
El grupo a punto esperando al sherpa Carlber para seguirle fielmente
Chapy, en el momento del día que más serio le vi. Más tarde he descubierto que a la naranjita la llama mala bestia...
Abominator, que le hizo a Kitxi el mejor regalo del día dejándole probar su Dominator, y Chapi
Reagrupamiento en el Cantó
El sherpa Carlber guiándonos
Una parada en el camino para reagruparnos, el sol pega fuerte y hay que aprovechar la escasa sombra
Tras una pista en subida en la que no sé qué pasó que hubo un poco de desbandada, y hasta alguno perdió parte del equipaje que tuvo que ir porteando luego nuestro sherpa hasta encontrar a su dueño, llegamos a este lugar.
Y seguimos. Tacos disfrutando de las vistas
La Africa Twin de Manchi, la pata de cabra más chula que he visto
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