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Tema: Nafarroa de abajo a arriba

  1. #1
    Veterano mototrailero
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    20 Oct, 08
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    Nafarroa de abajo a arriba


    A finales del 2011 las gentes del Euskal Trail Motards tras dedicarles mogollon de horas y exploratorias durante el año consiguieron finalmente enlazar los diferentes transitos y organizaron una salida nombrada: "Nafarroa goitik-behera" la cual contó con cerca de una veintena de participantes, entro los que me incluyo dotados de un popurri de maquinas en su mayoría trails "voluminosas". Desgraciadamente por un estúpido incidente me vi obligado a abandonar. Tenia pues la espinita clavada y las ganas de realizar este transito al completo y por ello cuando comentaron la intención de hacerla en estas fechas y consegui resolver los mil y un asuntos que me lo podían impedir, no dudé en aprovechar la oportunidad.

    No hemos sido los primeros, ni seremos los últimos, que se han atrevido a realizar esta travesía de Navarra de sur a norte la a lomos de trails bicilíndricas. Estamos convencidos que con el terreno completamente seco es incluso posible hacerla calzando “mixtas”, algo que demostró Detroitdiesel a lomos de su GS1200 en la primera edición del 2011, pero.. ¡¡ojo!!, que no se confunda nadie, esta ruta en conjunto es “exigente"”, difícil incluso en algunos tránsitos si no se cuenta previamente con cierta experiencia, recursos y habilidades.


    Nos desplazamos de víspera hasta las inmediaciones de Tudela, Mekanikan, Jatabetarra y el que suscribe. Justo con su Husky 610 calzada en esta ocasión con cubiertas propias de enduro las cuales limitaban sus tránsitos sobre asfalto a unos 80/90 kms/h ,mientras que la F800 de Guillermo, y mi “tractor amarillo” lo hacían con las cubiertas, en especial las traseras “a medio uso”.
    Los meteorólogos hablaban de un descanso en relación las elevadas temperaturas soportadas la semana previa y acertaron. Nos alojamos a unos 30 kms de Tudela, en un coqueto camping no muy lejos de Falces, en donde nos cedieron una hermosa habitación colmada de literas para nosotros tres. Tras algún bañito en la piscina, y consumidas varias “lejías” (cerveza + Kas limón) culminamos el día con una cenita liviana antes de dormir.

    El martes seis de agosto madrugamos, no habían dado aun ni las ocho de la mañana para cuando a abandonamos el referido camping poniendonos en dirección a Tudela. Era nuestra intención superar todo la calurosa parte sur Navarra para alcanzar la zona arbolada en la mayor brevedad. bien sabemos que el calor en la Ribera y Bardenas llega a ser insufrible en estas épocas.
    Cargamos los depósitos en Arguedas habiendo desayunado previamente en Tudela, asegurándonos de esta manera prácticamente “la etapa”. Creo que rondaban las nueve de la mañana para cuando reiniciamos nuestro transito bordeando el parque “Senda viva” antes de poder alcanzar la ermita de Nª Sª del Yugo. Algunos pedrolos gordos en una de las cuestas del inicio, motivaron extraños en el tren delantero y me pusieron sobre aviso de que no podría bajar la guardia. Tras subir y bajar unos cuantos “toboganes” nos adentramos finalmente en “el Plano” enfilando el embalse de "el Ferial" levantando los tres para entonces una estela de polvo notoria.

    Guillermo nos guiaba mientras yo me mantenía en puesto intermedio, y Justo por su parte rodaba un poco mas retrasado para evitarse en parte la polvareda. Los tres llevábamos el track en nuestros navegadores y eso nos permitía el intercambio de posiciones para poder respirar aire "limpio" de vez en cuando.
    Carcastillo estaba en fiestas, como siempre, y tras callejear un rato volvimos a nuestra faena, ahora en dirección Pitillas y Caseda.
    Acompañados por el rio-afluente Aragón, sin excesivo calor, habrá que reconocerlo, rodando sin tregua, transitábamos a buen ritmo, sin excesos, pero sin retrasos. En una de las pistas alcanzamos a un tractor con su remolque y tras varios infructuosos intentos de adelantarle decidimos finalmente detenernos y dejarle ventaja. Dicho y hecho. Tras la reanudación volvimos a cogerle apenas unos kilómetros después, y el labriego, erre que erre, sin querer dejarnos pasar… finalmente nos salimos del camino y lo adelantamos “campo através”aunque afortunadamente ya habían recogido la cosecha.

    Tras una discusión con el track al pasarnos un desvío para contemplar un puente, recogimos la ruta establecida por un sendero que suponemos tiempo atrás alguien lo transitaría pero al cual actualmente le haría buena falta unas cuantas horas de “jardinería”.
    Medio enganchando los manillares, el casco y las chaquetas entre zarzas, y apoyadas las ruedas sobre el canto de una ranura, pensando en quien coñe se le habrá ocurrido meterse por ahí, al rato afortunadamente cruzábamos Caseda, y de allí no tardamos mucho en alcanzar Sangüesa.
    Sonaban el toque de las doce para cuando orgullosos, pegando un cierto cante por nuestro look dakariano, transitamos por las callejas de la urbe.
    Al poco soltábamos por un rato la caballería transitando a velocidades de autovia aprovechando la anchura y correcto estado de la pista que ahora se nos ofrecía, aunque Jatabetarra, suponemos que algo sorprendido tras la aparición de una francesita, en el “pasa tú” , “o no, si vous plies, pasa tú” terminó enseñándole a la gabacha el cubrecarter de su Husqvarna y de paso levantado el polvo del camino con las posaderas… aunque afortunadamente sin más consecuencias a reseñar que la anecdótica.
    Apenas diez minutos después fue Guillermo quien le imitaba, ahora sin francesita a quien culpar, y todo por haberse relajado. Entró en el pie de una cuesta conduciendo sentado (en vez de hacerlo de pie sobre los estribos) y la BMW se le giró en sentido contrario al resbalarsele el tren delantero con una mierda de piedra mal colocada. Afortunadamente llevaba la chaqueta puesta, y no solo el peto y las coderas como inicialmente pretendía para minimizar el calor. Este golpe, aun sin consecuencias fue algo “más golpe” que el de Justo, y aunque salio ileso y libre de arañazos, le tocó por todas partes dejándole “molestias” para el resto de jornada.

    Era evidente que el calor y el número de horas conducidas nos iban ya pasando factura, así que coincidimos el trío en que necesitábamos rehidratarnos y tomar algo de azúcar. Con esa intención continuamos, ahora ya en búsqueda de: “el próximo bar que veamos”.
    Como suele ser habitual los bares, como las gasolineras, siempre se esconden cuando los necesitas, y al nada andábamos rodeados de mariposas dentro de un pinar ubicado en la ladera sur del pantano de Yesa. Lo largo y coñazo que se me hizo ese tramo.
    Dejada la pista principal empezó en tránsito por las de entresaca, y por allí era evidente que no había circulado nadie desde la última vez que algún colega utilizó este mismo track.
    Hacia ya bastante calor, mientras las mariposas se te metían hasta dentro del casco; de cierto en cuando hallábamos unos charcos estos con agua verde retenida y de fondo barro pastoso dispuesto a engullirse alguna de nuestras máquinas, y todo esto acompañado claro está, de decenas, cientos, miles de roderas y piedras. Vamos, ¡un placer de transito!

    Rato después, bastante quemadillos para esas alturas de la jornada conseguimos finalmente cruzar el pantano de Yesa por su extremo este, para dirigirnos ahora, afortunadamente sobre asfalto, por la antigua carretera en dirección a Pamplona. Alcanzada la gasolinera existente junto al cruce que lleva a Sigües y Esla ascendimos junto al curso del rio del mismo nombre; rondaban las catorce horas cuando nos detuvimos a comer.
    Tuvimos, una vez más, suerte, tanto en el correcto trato, como en la elaboración de la comida, y nos recuperamos “sobradamente” de nuestras deficiencias. Aún nos quedaban unos cuantos kilómetros sobre asfalto antes de alcanzar Burgi y Bidankoze (Vidangoz) en donde retornaríamos a las sendas.


    Personalmente conocía parte del tránsito de continuación al ser este coincidente con el de “La Transpirenaica” que realicé hace unos años atrás. Son pistas de tierra dura, de un par de metros escasos de ancho, sobre piedra y piedrillas.
    Rodamos, cubiertos mayormente por la vegetación, cerca de una hora sin mucho más que reseñar que un desprendimiento que impedía en tránsito a vehículos de cuatro ruedas, y que nosotros solventamos metiendo nuestras maquinas a la cárcava, mientras apoyábamos en el talud la pierna izquierda y evitábamos mirar hacia la derecha para librarnos de fatales atracciones. No fue difícil, aunque si mencionable.

    Nos sacamos la foto en unos de los puentes de la bella Otsagabia y reemprendimos de la misma la marcha dejando de paso boquiabiertos a una cuadrilla de traileros dotados de un popurrí de relucientes máquinas que nos miraban con ojos como platos mientras no sabían si aplaudir o abrazarnos. Os juro que aquellos se quedaron en duda si alguno de nosotros no era el Mark Coma ese. Para esas alturas era tal el polvo que llevábamos encima que parecíamos pilotos escapados de la Baja Aragón.

    Haciendo de guía, confiado todavía en que íbamos a utilizar el mismo trayecto que la ya nombrada "Transpirenaica" para alcanzar Bruguete, iniciamos confiados el camino hacia “la virgen de las Nieves” . He ahí que el gps me indicaba una desviación que no me sonaba de nada, aun así, confiado aun en el buen hacer de los “trazatxailes” , entramos felizmente por una pista cementada disfrutando del paisaje , abriendo y cerrando puertas que nos obligaban cada rato a desmontar al tiempo que atravesábamos lindos arroyos y nos encontrábamos preciosas cabañas hasta que en una de estas… ¡coñe!, que nos desaparece la pista tras hacer un giro. Acelero para superar el repecho existente y nos hallamos Guillermo y yo en medio de un hayedo, sin rastro alguno de camino, ¡ni de Justo! quien hasta entonces nos precedía. ¡¡¡Coooñe, que ha pasaoo.. !!!
    Los siguientes veinte o treinta minutos mejor no los menciono por respeto a los ascendientes de algunos de nuestros amigotes del foro Euskal Trail Motards en concreto de quienes “descubrieron” este singular tránsito.¡¡¡¡ (Kike si te llego a coger por allí te ibas a enterar!!!!!!)

    A tientas, siguiendo el trazado del gps, sin saber ni por donde, ni siquiera sobre que transitábamos, un ratillo después recogimos una nueva pista que nos acercó a Villanueva de Aezkoa desde donde optamos por descender a la ahora ya cercana Aribe, a repostar.
    Llevábamos apenas un poco más de 200kms recorridos, aunque la 610 cuenta con menor autonomía que las F800 y Ta700, y esta andaba ya en reserva.
    Charlamos brevemente con dos catalanes (GS1200) que encontramos en el surtidor y re emprendimos al poco la marcha, entrando por la antigua fábrica de armas de Orbaizeta nos dirigimos hacia Bruguete. Andaban metiendo maquinas por allí y acondicionando el camino así que en breve suponemos que no tardarán en prohibir el transito motorizado.

    Llegamos felizmente a la colegiata de Roncesvalles, no sin antes haber apreciado un notable descenso de temperatura y el relente que acompañaba a la niebla reinante. Satisfaccion tras el recorrido, llegaba al fin la hora del descanso. Para estas alturas llevábamos más de diez horas agarrados a las motos.

    Tratamos en un principio infructuosamente de buscar el alojamiento en alguna pensión para evitarnos así la esperada masificación de camping, el cual por cierto ya teníamos reservado, y era bien conocido por los tres. Supusimos que en el caso de que algún extraño compartiese la habitación con nosotros podía ser un “problema” a la hora de desprendernos de toda la parafernalia motera, GPS, cascos..en concreto a la hora ir a tomar algo. Finalmente todos nuestros temores se disiparon al otorgarnos en el camping una habitación con 5 literas (10 camas) únicamente para nosotros tres. Acomodamos allí sin problemas todos los bártulos, colmados de polvo y sudor, y nos tomamos incluso unas duchitas antes de empezar con las necesarias “rehidrataciones”.
    Cayó al poco un chaparrón que limpió bastante nuestras maquinas aunque hubo tiempo suficiente como para que algunos chavales hicieran cola para sacarles fotos. Cenamos sin prisa y a gusto, y una vez retornados al alojamiento convenimos en que “mañana” (miércoles) según como amaneciese decidiríamos la continuación. Vaticinaban agua y en verdad, ni Guillermo, que ya conocía al haber hecho el recorrido el año pasado, ni yo, estábamos muy por la labor de complicarnos a esas alturas en exceso la excursión.
    Había comentado Motozaharra que pensaba acercarse temprano, y acompañarnos durante esta segunda jornada de marcha, pero en verdad, con el pronóstico del tiempo que auguraban no confiábamos en su presencia.

    El miércoles siete de agosto amaneció oscuro, aunque sin lluvia, el suelo estaba seco así que decidimos arrancar pronto y ganar el mayor tiempo posible antes de que la lluvia “prometida” nos aguase -nunca mejor dicho- la jornada.
    Estábamos cargando las motos cuando apareció Motozaharra con su flamante KTM950, colmado de energía y con ganas de comprobar las actitudes de su nuevo juguete. Desayunamos en la colindante Espinal, y no eran aun ni las nueve para cuando reiniciamos la marcha.

    Cruzándonos con decenas de peregrinos, con el suelo deslizante, las ramas golpeando y las hojas mojadas, acompañados de un persistente “calabobos”, sorprendidos por donde nos llevaba el track, con mas de un juramento propio, y alguno de extraños, finalmente abandonamos la vegetación alcanzando una zona abierta cubierta con niebla que nos llevó al poco a Sorogain, concretamente al camino que lo une con Urepel.
    Si el barrillo y los deslizamientos no era lo más agradable para iniciar la mañana, por mi parte tenía un problema añadido al consabido sobrepeso de mi Honda y el ya mencionado desgaste de la cubierta trasera; entre el sudor y la humedad ambiente, la visera del casco tenía que llevarla completamente levantada al hallarse esta totalmente inutilizable haciendo que mis gafas se colmasen de agua y para coñe, se me empañaban los cristales, en especial en los tramos más delicados casualmente en donde era obligado el aminorar la velocidad, al no recibir estas el viento necesario para conseguir expulsar el vaho generado..

    Apenas viendo algo por el tercio superior del cristal derecho de mis gafas, continuaba como podía tras el resto del grupo, casi casi rodando a tanteo entre ranuras, soportando inoportunos deslizamientos del tren trasero por el barro y las engañosas hojas, sorteé con fortuna mas de un amago hasta que en una de estas “erré” (sin hache) y me quedé trincado por el barro metido hasta la panza en una cárcava.
    Gracias a la ayuda de los colegas que posibilitaron sacarla marcha atrás, y ayudarme en el reinicio de la marcha conseguí salir de aquella, aunque –por qué no decirlo- bastante disgustado puesto que la situación se estaba poniendo –al menos para mi- escasamente entretenida.
    Las posibilidades de darse un buen trompazo, se me estaban multiplicando exponencialmente, y como digo, esto a mí no me hacía ninguna gracia. A regañadientes, amenazando con abandonarles en cuanto pisara el asfalto, mis colegas me llevaron monte arriba, monte abajo sin darme tregua durante un buen rato.
    Afortunadamente la pista mejoró un poco y con mayor velocidad al menos el aire conseguía desempañar en parte mis cristales, así que salimos de aquella, sin daños aunque con el honor de mi loado “tractor amarillo” (TA700abs) algo mancillado.

    Aparecimos al poco sobre el pantano de Eugui y tanto Motozaharra como Mekanican recordaban por allí la existencia de un tramo “con escalones”. El día se había despejado y lucía ahora el sol, así que tras llamar desde allí arriba a las parientas, y ya recompuestos, iniciamos el descenso.

    Es evidente que no habría ninguna otra pista peor, ni supongo mejor que aquella por las cercanías, ¡pero en verdad hay que tener cojones de incluirla en el track!!!!.
    Si bajar por allí, colmada esta por con una millonada de piedras de todo tipo y tamaños, durante al menos “un par” , si no más de kilómetros , ya fue una tarea “delicada” haciéndolo sobre mi Transalp 700 -hay que reconocer que pinta bien distinta lucían tanto Motozaharra como Jatabetarra que se deslizaban por allí “como si nada” y cortesmente se detenían esperándonos para asegurarse nuestro feliz descenso; como digo, si conseguir bajar por allí es como para que te canten loados poemas al estilo el del “Mio Cid”, no te digo lo jodido que tiene que ser el subirlo. Solamente pensar en el apreciado Detroit diésel con su Gs1200 calzada con mixtas y Eugenio con su 1150GS ascendiendo por ese tramo, me entran escalofríos.
    En serio, no sé cómo sería aquello hace un par de años atrás pero ahora está más para ponerle unas banderitas y organizar una prueba de trial que para incluirlo en un track para el transito de placidos traileros. En caso de caída prefiero ni imaginar que es lo que te puedes romper y como quedaría la moto…

    Respirando hondo junto al pantano de Eugui, rodando por asfalto ascendimos por Quinto Real hasta las proximidades de la venta existente junto a la muga, en donde nos desviamos por una pista hormigonada dotada por cierto de notable pendiente.
    La niebla lo envolvía todo, aun así el trazado y el lugar merecían la visita. Alcanzado un alto la cosa cambió radicalmente, el hormigón “desapareció “ dando ahora paso a una pronunciada y ancha pendiente de barrillo amarillo en donde teníamos que utilizar los cojones como anclas porque las motos cogían velocidad y los frenos eran incapaces de detenerlas, todo esto mientras las motos pegaban bandazos a su libre albedrío.

    Gracias a la retención del motor, el injuriado abs y utilizando incluso ¡hasta el freno delantero de mi moto!, hecho este es algo inahabitual por mi parte al llevar mi Transalp igualmente frenada combinada y utilizar únicamente la palanca del freno trasero al actuar esta eficazmente en ambos trenes, como digo, conseguía a duras penas moderar la velocidad de mi Honda que aquella pronunciada pendiente generaba, la cual por cierto no se acababa nunca. Angustioso, putas, y más putas, a sabiendas de que si me caía no iba a haber manera de que me pudieran echar una mano, conduciendo con el tacto de un cirujano, casi de puntillas sobre los estribos, mientras la contemplaba los bandazos de quienes me precedían, tardamos -al menos para mí- una eternidad de salir de aquella “pista trampa”. Cuando finalmente llegamos a una zona plana poco nos importaba ya si esta deslizaba , había o no ranuras en ella , o cualquier otra cosilla que pudiera dificultar nuestro tránsito.
    Llegamos felizmente a Elizondo, y nos detuvimos allí a quitar un poco el susto y de paso a rehidratarnos. Llegamos con sol aunque apenas un cuarto de hora después salimos lloviendo, justo ahora cuando tocaba sortear la parte mas “entretenidilla” del recorrido.

    Nos hallabamos en el Baztan, la zona verde navarra por excelencia y por aqui los caminos sin barro no es facil hallarlos ni siquiera en agosto, imaginaros si encima no cejaba de llover como podríamos encontrarlos.
    Pasando por Lekaroz ascendimos hacia Bertiz y cuando el desgraciado del track nos remitió hacia una estrada algunos quisimos no verlo. Guillermo y yo optamos entonces por continuar sobre hormigón pista arriba con la confianza que en breve recuperaríamos el track, y a los otros dos compinches que como críos solo parecían querer meterse en complicaciones..
    Pues no; aparecimos en cambio en un caserío y tras ladrar nos un buen rato los perros hasta conseguir dar la vuelta, hubimos de deshacer lo recorrido y coger la dichosa estrada recién desechada.
    Ya conocía aquel sendero, puesto que me tocó transitarlo durante la "exploratoria" del mismo hace un par de años, aunque nosotros entonces lo bajamos y ahora nos tocaba subirlo.
    No era difícil, aunque para esas alturas los brazos, rodillas y piernas ya iban bastante resentidos y la cabeza estaba más con ganas de unas cervecitas que de andar de nuevo poniendo en riesgo el cuerpo y/o la mecánica.
    Llegamos a lo alto y la continuación era escasamente atrayente. Una rampa empinada y bastante larga justo en un momento en que la lluvia arreciaba. En seco posiblemente sería aquello ¡una chorrada!, pero en aquel momento, en cambio, el subconsciente indicaba RIESGO (con mayúsculas) innecesario a sabiendas de la existencia apenas a unos doscientos metros de allí de un empalme con la misma pista. Vuelvo a repetir que no era esta la primera vez que pasába por aquel lugar.




    Dos Acelerones y las KTM y Husky ya estaban arriba, ¡mira qué bien!. Guillermo y yo nos miramos y optamos por coger una segunda pista, que arrancaba a la derecha de la anterior, esta contaba con menor pendiente y suponíamos nos llevaría no muy lejos de nuestros “valientes” camaradas. Error, craso error, otra vez ¡cagada!.
    Tras superar un par de vallas no tardamos en darnos cuenta que desgraciadamente la pista nos alejaba de nuestro objetivo así que una vez más hubimos de dar meda vuelta.
    Llovía que se jodía, y tras consultar el GPS optamos entonces por interceptarles algo más delante. Tranquilamente, conduciendo sobre asfalto, calados hasta los huesos, -al menos yo-, incluso ya con frío al tener tanto la camiseta sudada como la chaqueta empapada llegamos al poco al punto por donde “en teoría” tenían que aparecer nuestros colegas. Nos quitamos los cascos y oímos sus motores, ¡pero no por la derecha como esperábamos, si no por la izquierda nuestro!. Nos habían sobrepasado por apenas un par de minutos, así que optamos por seguirlos para no perderles definitivamente.

    Para estas alturas ya las pistas patinaban hasta el apellido, y como no podía ser menos la cuesta por donde sus huellas nos dirigían era de las de: “a ver si conseguimos subir por ahí”. Con fortuna, colmados de veteranía y de bastante buena suerte, llegamos a lo alto encontrándonos frente a un portón cerrado. Allí no había ningún camino, apenas era un cercado para animales.
    Fue entonces tratando de “continuar”, asentados entonces sobre barro y cagada de vacas, con la rueda delantera apostada arriba como en una silla y la trasera yéndose hacia donde la daba la santa gana, cuando mi apreciada Honda dijo que hasta aquí te aguanto y la muy cabrita se tiró al suelo. Afortunadamente no hay pruebas fotográficas de este bochornoso sucedido, del que por cierto salí embadurnado de barro como una croqueta lo suele estar de de pan rallado, el reposapiés derecho dañado, y el espejo izquierdo movido, aunque afortunadamente nada roto.
    Estuvimos un rato buscando a pie la salida mientras apreciábamos algunas huellas de moto dirigiéndose “hacia no se sabe dónde”, las cuales nos cuestionábamos si en realidad serían o no de los nuestros. Lo cierto que nos habíamos metido en una estúpida trampa porque el descenso se las traía y en principio deseábamos evitarlo. Desgraciadamente no había mas remedio que volver por donde habíamos llegado. Quedamos en bajar hasta la primera curva, y luego con motor parado, ayudándonos de las correas del equipaje hacerlas descender entre ambos por allí.
    Llegado a la primera curva no me preció tan difícil la continuación, así que: suave, suave, aprovechándome de donde más piedra había, conseguí llegar hasta abajo, y tras de mi lo hizo igualmente Mekanican sin mayores problemas.


    Habíamos gastado las energías y la ilusión que aun nos quedaban asi que decidimos continuar a nuestro ritmo tras tratar una vez mas inútilmente de comunicarnos gracias a los móviles con la pareja que nos precedía. Para esas alturas nuestros GPS no sabían ni en donde nos encontrábamos. Nos dirigimos, un poco a tientas, lo reconoceré, hacia Etxalar, y una vez allí,dentro de un pórtico mientras me cambiaba de camiseta y colocaba sobre mi empapado equipamiento el buzo de agua, conseguimos finalmente contactar “con los de cabeza”.
    Concertamos entoices el lugar de quedada y de comida, y hacia allí nos dirigimos llegando una decena de minutos después donde ya nos esperaban sonrientes los dos “endurillos” de la partida. Comentamos nuestras recientes incidencias, e hicimos unas cuantas risas, disfrutando de la comida y en especial de la compañía.
    Ellos seguirían hasta el final hasta Lesaka, por nuestra parte, Guillermo y yo regresábamos ya a Mungia por la A8.

  2. #2
    Ya lleva tacos Avatar de txingui
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    Buena aventura Muguire, se ve que las pasaste "complicadas"

    un saludo

  3. #3
    Ya lleva tacos Avatar de yogi
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    Muy bien hecho Mugire, 10 de 10 puntos te doy

  4. #4
    Veterano mototrailero Avatar de JOE VESPINO
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    Cronicón!!
    "Menos mal que yo no creo en la violencia, porque si no os mataba a todos"

  5. #5
    Webmaster Avatar de FAZER
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    Buena crónica!!...de las que dan gusto leer y ver las fotos.
    Hay algo peor que no terminar un viaje,y es no empezarlo jamás.

  6. #6
    Veterano mototrailero
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    gracias colegas.

  7. #7
    Ya lleva tacos Avatar de zascandil
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    leere cronica cuando tenga pc que es mucha cronica para movil.......
    Jesús
    Honda Transalp 700, Gas Gas Pampera 250

  8. #8
    Veterano mototrailero
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    Aupa Jesús, hallarás repetida la crónica en los otros dos foros que igualmente compartimos. En verdad si me he animado a subirla aquí es un poco para romper una punta de lanza a favor de nuestras queridas Transalps 700.

    En este foro en general se hallan bastante minusvaloradas, cuando no despreciada, aunque en realidad, y bien lo sabemos quienes las poseemos, son una maquinas excelentes.
    Desgraciadamente, habremos de reconocer que fueron "incomprendidas" desde su lanzamiento.

    Por una parte es evidente que Honda cumplió sobradamente con sus deberes aunque a muchos no les gustase el resultado. Si nos fijamos en que es lo que hacían su competencia japonesa inmediata, concretamente Suzuki con la V-strom y Kawasaki con su Versys, asfaltandolas prácticamente en su totalidad abandonando definitivamente aquel originario 50-50 de las primitivas trails hasta llegar a los limites 0-100 ahora tan en boga Honda en cambio no solo mantuvo las aptitudes camperas de su Transalp 700, potenciándolas incluso a nivel de motor con unos extraordinarios bajos, pese a reducir su rueda delantera de 21´a 19´, algo que a la postre no ha sido en realidad "para tanto" puesto que como bien hemos demostrado una y otra vez, la Ta700 es capaz de circular igual de bien por Off que sus hermanas precedentes (600/650). Aunque es incuestionable que la mejoría en estas Transalp fue mas notable a nivel On road al dotarla de un mayor aplomo, mas velocidad punta, menor consumo, e incluso mucha mejor frenada (abs y combinada). Las TA700 incluso llegaron a igualar en prestaciones a las GS1150 que eran las maquinas a batir en su momento haciéndolo ademas con con 400cc menos!!.

    Es evidente que los de Honda no tuvieron en cuenta el avance que marcas como BMW podían realizar mientras ellos adecuaban el viejo motor en V incrementando-le la cilindrada e introduciendo la inyección y demás parafernalias necesarias para superar las normativas anticontaminantes Europeas. Mientras los técnicos de Honda se aplicaban con el veterano motor en V al cual por cierto difícilmente le podrían sacar un incremento de una decena o vientena de CV que a muchos les hubiese encantado sin disparar su "contenido" consumo, lo cierto es que a los teutones les dio tiempo a sacar no solo la brillante 1200gS -indudablemente una de las mejores maquinas construidas en el ultimo decenio- si no presentar ademas sus F800gs apenas unos meses después de su recién lanzamiento al mercado, las cuales eclipsaron sin contemplaciones a la japonesa.

    Aun asi, al menos en mi opinión, sigue siendo una maquina muy valida para el día a dia y creo que la expresión "polivalente" le viene como anillo al dedo. Es bastante baja y permite llegar con las plantas al suelo a la mayoría de los humanos; corre mas que "de sobra" en todo tipo de terrenos (en 2ª alcanza los 108 km/h!!) , y sin duda, es suave y enormemente fiable como se espera de una Honda, ademas de capaz de transportarte, sea en solitario como en compañía, por allí donde se te ocurra.

    ¿Cuantas de las maquinas que se utilizan en este foro serian capaces de andar a primeras horas de la mañana ascendiendo por pistas alpinas hasta mas allá de los 3000 mts de altitud (Col Sommelier) y apenas un par de horas después registrar los 156km/h en el GPS en las rampas del Gran San Bernardo yendo colmadas de equipaje y calzadas con tacos????. Reconozcamos lo, las Transalp 700 son sin duda unas TRAIL con mayúsculas.
    Última edición por mugire; 13/08/2013 a las 09:32

  9. #9
    Va por buen camino Avatar de Passicot
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    Donostia
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    Estupenda cronica como siempre Andoni.
    Te daria un 10 si supiera como hacerlo.
    Nos vemos

    Vssssssssss
    AnttonOff . Dominator 650 . Tenere 660 . F800GS , TENERE 700

  10. #10
    Gracias por la crónica mugire, y estoy totalmente que esa honda es una TRAIL!!

    Voy a buscar los de los punticos, a ver si se dártelos

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