Día 10. Gullesfjord - Rognan. 320km 13h



No os sorprenderá si os digo que hoy madrugamos, porque lo hacemos a diario, pero hoy todavía más. Un punto para los remolones que hicieron el esfuerzo en beneficio del grupo

El querer robar unas horas a la mañana es porque hoy vamos a hacer las islas Lofoten. Las recorreremos de norte a sur. Para volver al continente existe un ferry que sale de Moskenes hacia Bodo. El tema es que sólo salen 2 al día, uno a las 14h y otro por la tarde (demasiado tarde). Debemos coger el de las 14h sí o sí porque el trayecto son nada más y nada menos que 4h. Encima parece ser que no se pueden reservar los billetes / comprarlos por internet, por lo que hay que ir a hacer cola en el puerto, lo cual nos lleva a estar allí a las 12.30 - 13.00... así que GO!!!

Todo recogido y las llaves depositadas en el buzón pertinente. No les gusta madrugar en las recepciones y siempre tienen habilitado un buzón u otro mecanismo para que dejes las llaves al irte



Está muy cubierto. Las nubes bajas nos joden todo el paisaje. Hoy tiene que hacer bueno! Lo necesitamos!



Pero no escampa y vamos recorriendo las Lofoten adivinando cómo serían esos paisajes...



Hay algunos ratos despejados pero de repente las nubes caen como un torrente por la ladera y lo vuelven a cubrir todo



Es todo muy bonito, pero al mismo tiempo te deja ese sabor amargo, de rabia por no poder contemplarlo en su plenitud





Después de circular como una hora entre nubes, de repente se abre un claro, con un apartadero que nos grita para que nos detengamos



Por fin!!!!



Nos quedamos un buen rato embobados mirando el paisaje





Continuamos!





En algún lugar de la E10, entre Vareid y Flakstad (bendita geolocalización de las fotos) nos encontramos esta playa que deja al descubierto la marea baja. Inconscientemente soltamos gas y las motos se detienen, nuestros culos se despegan del asiento y bajamos a pisar la blanca arena.













Nos hubiéramos tirado ahí todo el día, si no fuese porque teníamos que pillar el ferry... y por el viento gélido que había. De ese que te tienes que cubrir los oídos porque duelen...

Seguimos!



Es una gozada rodar por las carreteras que discurren al lado del mar. En un día despejado se podría apreciar que lo que tenemos ante nosotros es mar abierto y no fiordos.



... aunque también los hay



Pasamos numerosos secaderos de pescado que a estas alturas de año se encuentran vacíos.





Hoy me siento un poco negativo, tengo el día flojo. Y el notar que te estás perdiendo la belleza extrema de este sitio, siendo que has venido aposta, siendo que por ello vamos a pagar la pasta del ferry a Bodo me pesa... pero hay que sobreponerse!



Y de pronto... se te pasa todo





[continúa]