Dia 9. Almería Barcelona 910 Km.
Después de tomarnos durante la noche un par de copas en el bar del barco, a las 07:00 en punto de la mañana llegamos al puerto de Almería y desembarcamos todos juntos.
Potxi nos da su aprobación al viaje.
Fuimos a buscar un bar para desayunar, tras lo cual dividimos el grupo en dos. Por una lado Potxi y Nacex, que se dirigían a Cuenca y Galicia respectivamente tomando las vías interiores. Por otro lado los cuatro catalanes que lo haríamos por carreteras más o menos pegadas a la costa mediterránea. Tras la despedida nos proponemos seguir en contacto e intentar volver a vernos, pues como ha dicho Arturo a pesar que no conocía a ninguno de los integrantes ha sido un viaje para recordar. Parecíamos amigos de toda la vida y a los dos días nos teníamos una confianza grandísima. Creo hablar en nombre de todos para decir que lo hemos pasado genial y nos hemos reído un montón; y hemos de hacer el propósito de volver a encontrarnos nuevamente.
Iniciado el largo viaje de vuelta, parada para el primer repostaje.
Seguimos del tirón y no paramos hasta la hora de comer en esta área junto a la autovía.
Y claro, toca repostar de nuevo.
Sin una sola parada, los que quedamos nos despedido y cada uno sigue para su casa. Al final del día os pongo la foto de la misma ruta que a la ida. Fijaros como corre la Integra 166 Km/h reales, que teniendo en cuenta la diferencia del 6% de más del marcador de la moto serían 176 Km/h. El decalaje era justo del 6%; a 50 de gps eran 53 de marcador. A 100 eran 106 y a 150 eran 159. Con una exactitud tremenda.
Al día siguiente del viaje la moto ya estaba a punto y como nueva para el uso diario. Toda limpita, repasada y engrasada. Verdaderamente ambas NC's se portaron de maravilla (las otras cuatro también, ojo) con una posición de conducción descansada y la comodidad que proporciona en Shad en los largos trayectos, su cúpula con una altura ideal para mí, el magnífico cambio DCT y un consumo irrisorio, que apenas superaba los 4'2 L/100 en autopista rodando a unos 135 Km/h de marcador, mientras que en Marruecos no llegó jamás a los 4 L con una mínima de 3'3 L/100, insuperable pues en todo momento rodábamos a ritmos más bien "altitos".
Adhesivo creado por Joan Ramon para la ocasión, para dejar constancia de este viaje.