Hace ya casi una década hablé con un pequeño productor audiovisual que se dedicaba a los deportes. Le pregunté por qué no había un programa de motos tipo top-gear en el que se pudiera hablar de los defectos de las motos. Me comentó precisamente la que no podían morder la mano a las marcas.

Por suerte estos dos han abierto las ventanas y les ha salido redondo.