Parece que el destino me tenía preparada una pequeña prueba para este fin de semana.
Para empezar, el viernes, (salía a las 10 y media de Valencia) se me soltó la manguera del camel back y se me mojó la espalda y el pantalón. Era un aperitivo.
A la media hora de ruta comienza la tormenta. “llevo Goretex”, pensé. Pero tras varias horas la lluvia acabó entrando a las botas y por el hueco entre la chaqueta y el casco.
Solo el viaje en solitario con la tormenta y seis horas de viaje mojado y con frío ya dan mucho que contar. Muchas sensaciones. Pero esa no era mi pequeña prueba.
Creo que eran las 5 y algo de la mañana cuando Tacos y Pepepower me recogieron a la entrada de Loarre. Me cambié ropa seca y dormí como un lirón. Fue una gran recompensa.
El sábado comenzaba una de las mejores rutas trail que he disfrutado. Las vistas increíbles, las pistas divertidísimas, la organización un 10, el hospedaje perfecto y la compañía inmejorable. (suena a peloteo, pero si seguís leyendo comprenderéis que no lo es). Ya habrá quien describa mejor toda la quedada, con fotos y tal. Mi pequeña prueba quedaba reservada para el domingo.
En Ujue el viento soplaba muy fuerte. Así que uno de esos golpes de viento me hizo amigo del suelo. Consecuencia: maneta de embrague partida. El sentimiento de SOLIDARIDAD es lo que más se me va a quedar de esta aventura. En cuestión de minutos apareció un recambio y las manos expertas para solucionar el problema. Gracias a todos. Pero de nuevo, esto fue otro aperitivo.
Finalmente, camino de Olite, en una pista fácil, y marchando a poca velocidad, al entrar en una curva a derechas, la BMW quería irse hacia la izquierda. Como tantas otras veces pensé en tomar la curva por la rodera más exterior, ligeramente peraltada. Pero, de repente, un agujero!. La rueda delantera se clavó haciendo que volara por los aires. Inevitablemente salí del camino. KTMfree iba inmediatamente detrás de mí, y supongo que podrá describir con más detalle como fue.
Desde mi perspectiva, un golpe fuerte y seco en el pecho, otro en la bota, tras la sacudida, rodar y rodar hasta acabar tendido en el suelo. ¿estoy bien? Si, y la moto… Abel se acerca a mí a los pocos segundos, le digo que estoy bien. Miramos la moto y vemos la rueda destrozada, ¡Mira la moto! Poco a poco van llegando el resto, y de nuevo SOLIDARIDAD es el sentimiento que está en el aire. Un auténtico equipo de auxilio sacó mi moto del monte hasta el camino y se volcó absolutamente conmigo, a partir de ahí no me tuve que preocupar de nada.
Solo ha pasado un día, y lo veo todo tan lejano… Gracias a todos. Gracias por todo, en especial a Txanku que me ha tratado como a un hermano.
Como Juanmiroquai dijo, ahora siento como si me hubieran dado una paliza. Espero recuperarme pronto, arreglar la moto y estar de nuevo rodando a vuestro lado.
No tengo fotos, pero se hicieron unas cuantas, ya las iréis subiendo. Gracias otra vez.
Esta fue la pequeña prueba que el destino me tenía guardada. :roll:
Siento el ladrillazo
La libertad viaja sobre dos ruedas. 
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