Bueno, pues esta es la crónica de un viaje inacabado. Iban a ser ocho días pero al final nos tuvimos que conformar con la mitad. La razón: el pronóstico del tiempo, que daba lluvia por el norte durante tres días, lo que supuso que nos volviéramos a Madrid. Así pues nos perdimos lo que es el "norte - norte". Por contra el tercer día pasamos calor - calor por la parte norte de la provincia de Burgos. Pero vayamos por partes


El primer día la etapa partió de la sierra Oeste de Madrid (Digamos, Robledo de Chavela) y fuimos hasta Salduero (Soria), lo que suponen unos 330 Km. Comentaros que aunque llevamos dos motos de Trail muy "endureras" no le hacemos asco al asfalto, por lo que en la ruta aproximadamente un 30% del trayecto lo hicimos por carretera. A 100 km/ h se va cómodo en estas motos, que por eso son motos Trail. Como dato comentaros que en orden de marcha y con el depósito a tope las motos pesan unos 160 kg. A esto añadir unos 15 kg por moto del peso de la herramienta, los portaalforjas, las alforjas, el equipaje y el "pitón" (que él solito ya pesa 3kg)


Bueno, pues a la hora de salir, una parada todavía por la sierra de Madrid para quitar cosas de la mochila y meterlas en las alforjas: mucho peso se había cargado Decimoquinta en la espalda...






Seguimos avanzando, y tras pasar San Rafael, ya en Segovia, cogemos un camino. Foto y sitio igual al del año pasado, pasando por debajo de la Autovía A-6.






A las dos horas más o menos de iniciado el viaje, paradita para tomar café. En un pueblecito llamado "El chaparral" en la sierra de Segovia, en la terraza se estaba muy bien.






En Collado Hermoso paramos a echar gasolina y a comer. Justo enfrente de la gasolinera hay un sitio que nos gusta, con una gran terraza y raciones apetitosas. El helado artesano (tardaron en prepararlo) de los mejores que he comido. Casi lloro de gusto, jajaja







Panorámicas de la zona, sin haber cruzado todavía la A-1 (viajamos dirección Noreste)








Aqui panorámica pasado Ayllón





Y aqui panorámica pasado El Burgo de Osma. El cortafuegos trascurre por lo alto de una pequeña sierra. Una gozada seguramente para hacerlo con ruedas de tacos, pero con ruedas mixtas no permitía alegrías, pues había zonas donde la grava tenía cierta profundidad.









El hostal donde nos quedamos la primera noche. Lo mejor su ubicación, en el centro del pueblo en una plaza bastante grande con mucho sitio donde aparcar y con el río Duero a solo unos metros. Lo peor la habitación: en nuestra opinión muy pequeña. La cena del menú estuvo bien.





Bueno, y hasta aqui lo que dio de sí esta jornada. Mucho calor, como era predecible, pero soportable






Os dejo un enlace a un vídeo. Perdonad que por el polvo a veces la calidad de la imagen no es muy allá...




Mañana más