Yo creo que más o menos todos tenemos en la cabeza una idea predeterminada de las diferentes marcas de motos, incluso me atrevería a decir que de la nacionalidad de las motos.
La globalización acerca todo peor esos clichés (¿o prejuicios?) de las motos por su nacionalidad, ¿tienen sentido?

Me mojo y defino cómo veo yo cada nacionalidad:

JAPONESAS: Si algo las define es el equilibrio y la homogeneidad. Rara vez ves un modelo en la que el motor sobrepase al chasis, o el chasis esté claramente sobredimensionado para la potencia que tiene.
Son motos "correctas" en todo... buenos componentes, pero rara vez pata negra; buenos materiales, pero sin abusar de materiales exóticos; buenos motores, pero rara vez llevan lo último en tecnología y/o potencia,...
Tecnología de última generación, pero casi siempre bien probada. Buscan un funcionamiento homogéneo y fino, y una fiabilidad y mantenimiento buenos.

ALEMANAS: Cuidado por la calidad de aleaciones y mecanizados. Muy innovadoras (ABS e inyección a finales de los `80) y a la vez particulares en tecnología y chasis. Motores muy eficientes. Motos muy duraderas, que no siempre significa fiables.
En las últimas 2 décadas han pecado de problemas de fiabilidad, muchos de ellos por lanzar "lo último" que han parido sin un test previo suficiente.
Se abanderan mucho en su propia identidad (boxer, levers) y eso aveces les hace esclavos de su propio enrocamiento. Pero a la vez cautiva a un público incondicional que busca esas señas de identidad, sean o no lo más eficiente y eficaz.

AUSTRIACAS: Ready to race... Excelentes máquinas, componentes pata negra. Pero que a menudo sacrifican estética, comodidad, mantenimiento, fiabilidad por ganar el último CV o diseñar alguna solución en la que creen.

ITALIANAS: Motos bellísimas, con componentes pata negra, pero que a menudo ponen por encima de la funcionalidad, la eficacia y la homogeneidad del conjunto, esa estética que buscan. Pueden tener componentes (frenos, suspensiones,...) descompensados, si cumplen esa función estética.
Históricamente han tenido una fiabilidad más que dudosa, especialmente por temas eléctricos, que aunque parecen solucionados, arrastran esa fama y se ven lastradas por ella.

KOREANAS: Buscan la mejor relación calidad/precio. Tienden a usar la penúltima tecnología, de tal manera que está perfectamente testada, a cambio de no tener las máximas prestaciones ni eficiencia. Buscan (en la última década) también una estética y acabados que refuercen la sensación de calidad que originalmente les faltaba.

CHINAS: Buscan el mínimo precio manteniendo las prestaciones al nivel de las mejores. Destacan por llevar lo último en electrónica, pero enfocado más a gadgets (pantallas multifunción, mandos, multimedia y conectividad) pero no en la parte electro-mecánica (CT, cornering ABS, mapas de potencia, suspensiones electrónicas,,...) y cuando las incluyen suelen ser de dudosa calidad, efectividad y fiabilidad.
Poco cuidado con aleaciones y mecanizados.
Motos hechas para ser muy llamativas el día que las estrenas, por estética, equipamiento, gadgets electrónicos, y datos sobre el papel (CV), pero no preocupa que 10 años después sigan siendo igualmente atractivas.

INDIAS: Nada de riesgo. Tecnología ultraprobada de al menos hace 20 años. Motores de carrera larga, refrigeración por aire,.... Pocas rpm. Componentes básicos de concepción (olvídate de horquillas invertidas o frenos radiales, obligatorios aunque de calidad ínfima en la china más barata) pero que funcionan razonablemente bien.
Nada de aleaciones exóticas... ni el aluminio es demasiado profuso. Todo es acero, que añade peso al conjunto, a la vez que solidez, resistencia y fiabilidad.
Y en los último años, no sólo venden motos, sino también "nostalgia"