MiguelXR33
21/02/2009, 23:35
Con esto empezó todo... Dos horas resistencia Vespinos Utiel (http://www.mundotrail.com/phpbb2/viewtopic.php?t=2516&start=0&postdays=0&postorder=asc&highlight=)
PREVIO:
CONFESIONES DE UN INSOMNE
u
OTRA FORMA DE CUMPLIR 42
Llevo desde las tres y media despierto. Iba a levantarme a las seis, salir del camping en Estivella, ir a casa, desayunar, cargar el coche y tirar para Alfarrasí. Pero a las cinco y cuarto he decidido dejar de dar vueltas y me he levantado.
Y aquí estoy, cara al ordenador, con la alarma del reloj diciéndome que es ahora cuando debía haberme levantado. Así que, como de estas Tres Horas de Alfarrasí hay unas chorradas que me preocupan, las voy a contar…
-Me preocupa que la prueba, es más, estoy convencido de ello (y ojalá me equivoque), va a perder la magia de la primera. En la primera todo fueron comentarios sobre si te voy a ganar, tú a mí ni de coña, fotos de motos… en esta nada, oscurantismo total, solo más ensombrecido viendo algunos fieras que se han inscrito. Espero que predomine el pasárselo bien, y que no tengamos ningún problema, ni de lesiones ni de picadas demasiado bestias. Ojalá.
-Me preocupa que es la primera vez, en las veces que he competido, que voy de “piloto de fábrica”. Yo siempre me he encargado de mi moto, muchas veces con amigos ayudando un mucho, pero el toque final siempre había sido mío. En esta no, es mi amigo Zape el que se está encargando de las revisiones, puesta a punto, neumáticos, transporte… y yo apenas le he puesto unas pegatinas, material antideslizante a las estriberas y limpiado el depósito. Tengo claro que el vespi va a ser más competitivo y dará menos problemas, pero la verdad, me hubiera gustado hacerlo yo.
-Me preocupa mi estado de forma. Estoy gordote como nunca, además me he negado en redondo a prescindir de cerveza y fritanga, por lo que soy totalmente culpable. Apenas he hecho mil kms. de entrenamiento esta última semana, pues llevaba tres sin catar moto. Y encima la maldita epicondilitis me sigue dando la murga, y mi nuevo traumatólogo no me quiere infiltrar… dolor seguro en toda la carrera. Espero que no me impida correr.
-Me preocupa el miedo escénico… y no por correr sino porque, por primera vez en todas mis carreras, voy a tener visita de familiares y amigos. Mis tíos Salva y Mari, y mi primo David. Mi amigo adrioskar. Algunos del foro. Y encima apadrino a un compañero de trabajo, maracolo, en su debut en la competición, y éste sí que no duerme apenas nada desde hace días. Así que no sé como voy a llevar la tensión de la carrera con el atender a mi público. Espero no hacer mucho el ridículo con mi comportamiento.
-Me preocupa cumplir hoy 42 años, y seguir estando ilusionado como cuando tenía 20. ¿Será normal?
-Por último, me preocupa que llueva. Me molesta el hombro y el brazo, y de camino a casa cayeron unas gotitas en el parabrisas. No me gusta mojarme, que ya me he pegado unas cuantas chopadas buenas.
En fin, nos vemos en las carreras. Espero contar que todos mis miedos fueron infundados. Voy a cargar el coche, desayunar y para el circuito. Son las seis y media.
LA CARRERA:
MÁS LUCES QUE SOMBRAS.
Como la otra vez, vuelvo a ser el primero en llegar al circuito, sobre las nueve menos cuarto. Y como la anterior, las nubes y la llovizna me acompañaron, pero aquí me respetan. Después de indicarles a los amigos la (complicada) ubicación del sitio, cumplo mi costumbre de darle un paseo a la pista, a ver que pinta tiene. Ummmm, nada mal, algo más rápido que Utiel, y con subiditas y bajaditas… fatal para mis más de cien kg.
http://fotos.subefotos.com/794d2e2f42280af957ff8f285fb13bf9o.jpg
Magnífico aspecto el del circuito
Me entrevisto con Jero Vidal, un tipo estupendo, como una especie de embajador de Voromv, el gran organizador, para ir comentando sobre el paddock, las instalaciones, la comida. Llega mi amigo Maracolo, y nos damos otro paseito por la pista, para relajar nervios y comentar el estado.
Y, como ya pasó en noviembre, llega la avalancha, gente gente y más gente. Saludos, abrazos, bromas… ¿y donde están los de mi equipo?, porque los pilotos estamos, pero las motos se retrasan… camino equivocado. Se nos echa el tiempo encima, muchos ya están dando vueltas, y nosotros bajando motos. Ni siquiera hago la foto que me hacía ilusión del “Zape Endurance Team”, en el que estamos encuadrados los dorsales 25, 26, 66 y 31… Me están ganando los nervios.
http://fotos.subefotos.com/559628a43aafb47d8d7aecce82c7862do.jpg
Hachazos en todas las curvas
Son ya las diez menos veinte y, habitual en mí, comienzo a hacer el ridículo con mi mal genio… si por lo menos no tuviera esta voz… Un último repaso a las ruedas, sujeto el depósito alto con cinta (aunque, por supuesto, ninguno de los cuatro falló, como aseguró Zape) y rápido a pista. Unas pocas vueltas, y voy pasando el manillar, para por lo menos hacer todos un contacto del circuito. Un poco más de aire, carreras arriba y abajo con las inscripciones, con la comida, saludando a mis tíos Mari y Salva y primo David, últimas estrategias… y empieza la carrera.
Como el orden de salida se había sorteado (lo menos injusto al no poder cronometrar) y nos tocó los primeros, decidimos que la salida la hiciera Toni, que no tenía mal ritmo y está acostumbrado a los embudos de su época de clásicas y RD-deccla. Después saldría yo, y por último, que Voromv volviera a gozar del banderazo final… si terminábamos.
http://fotos.subefotos.com/c901ccb17f0c05c94825e5ed3e3d6b8eo.jpg
¡Al ataque!
Y comenzamos con desastre. Toni sale muy bien (segundo) pero se lo llevan por delante ¡dos veces! y entra en boxes, quejándose de la mano derecha… no sangra y a pista: tres vueltas perdidas. Mal.
Me toca. Nada de frenos, sobre todo atrás. El motor comienza a ir justito… y vuelve la pesadilla de las primeras “dos horas”: el motor se queda corto de gasolina, y hay que darle al estárter para que recupere. Hacia el final de mi primera media hora, y después de unos gestos, del tirón a box para que Zape y su cuñado le den un repaso al carburador… posiblemente chiclé obstruido.
http://fotos.subefotos.com/a5737f6be0a4e23c3659626b8a9c3069o.jpg
"Solo" 42 años y 105 kg... y el vespi aguantó...
Voromv entra a pista, y al rato a boxes. Y Toni, tres cuartos de lo mismo. Zape (que es el que mejor se lo está pasando haciendo de director-coordinador-mecánico de tres equipos y medio) al ver que la “enfermedad” también le ocurre a otra, decide subir el surtidor, del 55 de serie, a un 60… y ahí parece acabar el problema. Me toca correr.
Y corro. Y el vespi corre. Ya apenas hay frenos, pero por fin disfruto y dejo atrás a los que adelanto, sin preocuparme el motor. Y tanto gozo, que me sacan la pizarra y no quiero entrar… una vuelta más, sólo una… y se lo paso a Voromv que cumple la misión: finalizar la prueba.
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Mi amigo Voromv
Acaba la carrera, y todo son caras de felicidad, excepto las de algunos que se quejan de algunas motos. Así que se cumple la salomónica decisión de verificar todas las que terminan, por lo menos en tres puntos: neumáticos de calle, carburador de 12/12 y suspensiones de serie. Al final, la desagradable obligación de excluir a cuatro equipos. Por lo menos, todos han participado… pero seguro que escuece ver como se te escapa el podium…
http://fotos.subefotos.com/e2dfd3d80e42d8f4d7e102021fe1171do.jpg
"To Veneno Corse": Toni, Voromv y yo
Pero la cosa todavía no acaba ahí, y después de recoger y comer, toca el estudiar el cuentavueltas definitivo y la confección de diplomas. Y me voy por fin, con mi diploma y el de Toni, que nos acredita como novenos… jolín, otra vez noveno… Si no nos hubieran tirado en la primera vuelta, si no hubiera fallado el motor, si hubiéramos tenido un poquito más de frenos, si…
Y en casa, bajando el vespi, todo más claro. Relevos más largos. Frenos mejores. Un filtro de gasolina bien gordo, y otro preparado, por si las moscas. Y mejor decorada, que esta vez no resulta nada atractiva. Porque mi mente ya está en la siguiente cita. Como la de todos nosotros.
EPÍLOGO:
EN QUÉ ACERTÉ Y EN QUÉ FALLÉ.
Toca repasar mis miedos y dudas del domingo de madrugada. Y lo haré como lo escribí, por grupos.
-Mi primer miedo era que se perdiera la inocencia de la primera prueba. Fallé… y acerté.
La gran mayoría volvió a acudir a pasárselo bien, y se lo pasaron muy bien. Me alegraba ver la cara de felicidad de la mayoría, y esa cara picarona de los debutantes… como bien comenta Tino, y le dije a mi amigo Maracolo: como el primer polvo. Y encima, sin lesiones de gravedad… aunque alguno ya va escayolado.
Pero también acerté en el ánimo excesivamente competitivo de algunos. Gente comentando el ritmo de algunos jóvenes. Otros comentando sobre la ilegalidad de algunas motos. Solo eran unos pocos, pero se estropeó, en parte, el ambiente.
Sobre la juventud solo decir lo que dicen nuestros ancianos ¡quien la pillara! Porque tengo claro que otro ritmo hubiera llevado si me coge con veinte años…. Pero claro, el problema estaba en que los jóvenes son más arriesgados, tienen más tiempo libre y están más acostumbrados a llevar y afinar ciclomotores y, claro, una cosa se juntaba con la otra ¡e iban como cohetes! Y yo que he visto como se preparaban los aparatos en “Zape Endurance Team” tenía claro que, simplemente con las pruebas que hacían con rodamientos, tubarros y neumáticos, de ahí saldrían unos pepinos, legales en cuanto a reglamento, pero afinadísimos de prestaciones… y no me equivoqué. Los cuatro funcionaban divinamente, pero luego el peso de nuestra edad y cuerpos no nos permitía sacarles el rendimiento posible a nuestro F-9… que, por si no lo sabéis, también era del grupo.
Todo ello llevó a descalificaciones, correctas en temas como carburador, manillares, o amortiguador hidráulico, y más justa con el amortiguador regulable pero sin retención… ahora, el reglamento lo ponía claro, y al final cuatro fueron los “sacados fuera de lista”, dos de ellos entre los cinco que dieron más vueltas. Lo bueno es que veo, hoy jueves, que por lo menos uno de los afectados se lo toma con deportividad y ¡ya está pensando en la siguiente prueba!. Que no cambie para la próxima.
-Mi siguiente miedo giraba sobre el ir de “piloto oficial”, esto es, que el vespino venía directamente de “Zape Endurance Team”, donde Adri, Jesús y su cuñado estuvieron evolucionando cuatro aparatos. En nuestro caso, llevábamos depósito elevado (y aun así dio problemas), correa y rodillos de variador, neumáticos nuevos, estriberas en vez de pedales y algo más de aligeramiento. Pero ya digo que, aunque pasé bastante por allí (que pesao) y la toquetee un poco, me faltaba mi toquecito… que tuvimos que hacer de prisas y corridas antes de carrera, en vez de entrenar. Y claro, eso con mi carácter en cuanto me pongo nervioso no va bien. Voces, gestos, palabrotas… y lo que más me fastidia es que se me pasa así como llega, pero el espectáculo ya está dado. Por suerte Jesús demostró no solo ser un buen amigo y un mejor mecánico, sino además tener una paciencia infinita. Gracias a todos los que integráis el equipo por soportar mis estupideces. Ahora, eso sí, no vuelve a salir el vespi de mi casa hasta que no tenga un aspecto digno… que soso y anodino está, por favor, sobre todo comparado con el look anterior. Imperdonable. Y, por supuesto, con las presiones ajustadas a mi gusto…
-En cuanto a correr fondón… al principio iba un poquito agarrotado, la verdad, pero el último relevo, entre que el vespino ya no volvió a fallar y yo estaba caliente, me lo pasé estupendo, adelantando a bastantes… y siendo adelantado, por supuesto. La epicondilitis apenas me molestó y, la verdad, me quedé con las ganas de rodar otras dos o tres tandas… ¿una carrera a seis u ocho horas? ¿y porqué no? La verdad es que mientras el cuerpo aguante y no quede el último destacado, tengo ilusión para rato… y cuerpo, que esto no es moto-cross. Ahora, eso sí, debería perder un mucho de peso… el pobre 50cc me lo agradecerá seguro…
http://fotos.subefotos.com/91af592047223fcfd7e3cd25e9e0cd09o.jpg
-El miedo escénico lo llevé mal… apenas pude atender a mis tíos y primo, y suerte que no vino nadie más. Lo de la atención a mi familia por desgracia lo imaginaba, porque una vez te pones en faena, y aunque tienes rato entre relevo y relevo, los fallos de nuestro vespi no me permitieron relajarme y disfrutar de su compañía… menos mal que me conocen de toda la vida. Gracias por el apoyo y las fotos.
-Lo de los 42 años ya lo he comentado antes ¡Hasta que el cuerpo aguante! Es estimulante seguir pegando hachazos y ver que no eres de los malos… porque de los mejores no he sido nunca, pese a lo que dicen algunos. Por cierto, mis hijos me han regalado “Un mundo sin fin” de Ken Follett. Magnífico. Si solo es la mitad de bueno que “Los pilares de la tierra” me doy por satisfecho.
-Y por último, por suerte solo nos llovió de camino y de vuelta… y nada en la pista. Tuvimos suerte, y mi dolorido hombro lo agradeció. Que malo es hacerse mayor.
Me veréis en la siguiente. Seguro. M.
La historia en gripaos.com (http://gripaos.superforos.com/viewtopic.php?t=207) y en mundotrail.com (http://www.mundotrail.com/phpbb2/viewtopic.php?t=2959&start=0&postdays=0&postorder=asc&highlight=)... y la opinión de la gente.
PREVIO:
CONFESIONES DE UN INSOMNE
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OTRA FORMA DE CUMPLIR 42
Llevo desde las tres y media despierto. Iba a levantarme a las seis, salir del camping en Estivella, ir a casa, desayunar, cargar el coche y tirar para Alfarrasí. Pero a las cinco y cuarto he decidido dejar de dar vueltas y me he levantado.
Y aquí estoy, cara al ordenador, con la alarma del reloj diciéndome que es ahora cuando debía haberme levantado. Así que, como de estas Tres Horas de Alfarrasí hay unas chorradas que me preocupan, las voy a contar…
-Me preocupa que la prueba, es más, estoy convencido de ello (y ojalá me equivoque), va a perder la magia de la primera. En la primera todo fueron comentarios sobre si te voy a ganar, tú a mí ni de coña, fotos de motos… en esta nada, oscurantismo total, solo más ensombrecido viendo algunos fieras que se han inscrito. Espero que predomine el pasárselo bien, y que no tengamos ningún problema, ni de lesiones ni de picadas demasiado bestias. Ojalá.
-Me preocupa que es la primera vez, en las veces que he competido, que voy de “piloto de fábrica”. Yo siempre me he encargado de mi moto, muchas veces con amigos ayudando un mucho, pero el toque final siempre había sido mío. En esta no, es mi amigo Zape el que se está encargando de las revisiones, puesta a punto, neumáticos, transporte… y yo apenas le he puesto unas pegatinas, material antideslizante a las estriberas y limpiado el depósito. Tengo claro que el vespi va a ser más competitivo y dará menos problemas, pero la verdad, me hubiera gustado hacerlo yo.
-Me preocupa mi estado de forma. Estoy gordote como nunca, además me he negado en redondo a prescindir de cerveza y fritanga, por lo que soy totalmente culpable. Apenas he hecho mil kms. de entrenamiento esta última semana, pues llevaba tres sin catar moto. Y encima la maldita epicondilitis me sigue dando la murga, y mi nuevo traumatólogo no me quiere infiltrar… dolor seguro en toda la carrera. Espero que no me impida correr.
-Me preocupa el miedo escénico… y no por correr sino porque, por primera vez en todas mis carreras, voy a tener visita de familiares y amigos. Mis tíos Salva y Mari, y mi primo David. Mi amigo adrioskar. Algunos del foro. Y encima apadrino a un compañero de trabajo, maracolo, en su debut en la competición, y éste sí que no duerme apenas nada desde hace días. Así que no sé como voy a llevar la tensión de la carrera con el atender a mi público. Espero no hacer mucho el ridículo con mi comportamiento.
-Me preocupa cumplir hoy 42 años, y seguir estando ilusionado como cuando tenía 20. ¿Será normal?
-Por último, me preocupa que llueva. Me molesta el hombro y el brazo, y de camino a casa cayeron unas gotitas en el parabrisas. No me gusta mojarme, que ya me he pegado unas cuantas chopadas buenas.
En fin, nos vemos en las carreras. Espero contar que todos mis miedos fueron infundados. Voy a cargar el coche, desayunar y para el circuito. Son las seis y media.
LA CARRERA:
MÁS LUCES QUE SOMBRAS.
Como la otra vez, vuelvo a ser el primero en llegar al circuito, sobre las nueve menos cuarto. Y como la anterior, las nubes y la llovizna me acompañaron, pero aquí me respetan. Después de indicarles a los amigos la (complicada) ubicación del sitio, cumplo mi costumbre de darle un paseo a la pista, a ver que pinta tiene. Ummmm, nada mal, algo más rápido que Utiel, y con subiditas y bajaditas… fatal para mis más de cien kg.
http://fotos.subefotos.com/794d2e2f42280af957ff8f285fb13bf9o.jpg
Magnífico aspecto el del circuito
Me entrevisto con Jero Vidal, un tipo estupendo, como una especie de embajador de Voromv, el gran organizador, para ir comentando sobre el paddock, las instalaciones, la comida. Llega mi amigo Maracolo, y nos damos otro paseito por la pista, para relajar nervios y comentar el estado.
Y, como ya pasó en noviembre, llega la avalancha, gente gente y más gente. Saludos, abrazos, bromas… ¿y donde están los de mi equipo?, porque los pilotos estamos, pero las motos se retrasan… camino equivocado. Se nos echa el tiempo encima, muchos ya están dando vueltas, y nosotros bajando motos. Ni siquiera hago la foto que me hacía ilusión del “Zape Endurance Team”, en el que estamos encuadrados los dorsales 25, 26, 66 y 31… Me están ganando los nervios.
http://fotos.subefotos.com/559628a43aafb47d8d7aecce82c7862do.jpg
Hachazos en todas las curvas
Son ya las diez menos veinte y, habitual en mí, comienzo a hacer el ridículo con mi mal genio… si por lo menos no tuviera esta voz… Un último repaso a las ruedas, sujeto el depósito alto con cinta (aunque, por supuesto, ninguno de los cuatro falló, como aseguró Zape) y rápido a pista. Unas pocas vueltas, y voy pasando el manillar, para por lo menos hacer todos un contacto del circuito. Un poco más de aire, carreras arriba y abajo con las inscripciones, con la comida, saludando a mis tíos Mari y Salva y primo David, últimas estrategias… y empieza la carrera.
Como el orden de salida se había sorteado (lo menos injusto al no poder cronometrar) y nos tocó los primeros, decidimos que la salida la hiciera Toni, que no tenía mal ritmo y está acostumbrado a los embudos de su época de clásicas y RD-deccla. Después saldría yo, y por último, que Voromv volviera a gozar del banderazo final… si terminábamos.
http://fotos.subefotos.com/c901ccb17f0c05c94825e5ed3e3d6b8eo.jpg
¡Al ataque!
Y comenzamos con desastre. Toni sale muy bien (segundo) pero se lo llevan por delante ¡dos veces! y entra en boxes, quejándose de la mano derecha… no sangra y a pista: tres vueltas perdidas. Mal.
Me toca. Nada de frenos, sobre todo atrás. El motor comienza a ir justito… y vuelve la pesadilla de las primeras “dos horas”: el motor se queda corto de gasolina, y hay que darle al estárter para que recupere. Hacia el final de mi primera media hora, y después de unos gestos, del tirón a box para que Zape y su cuñado le den un repaso al carburador… posiblemente chiclé obstruido.
http://fotos.subefotos.com/a5737f6be0a4e23c3659626b8a9c3069o.jpg
"Solo" 42 años y 105 kg... y el vespi aguantó...
Voromv entra a pista, y al rato a boxes. Y Toni, tres cuartos de lo mismo. Zape (que es el que mejor se lo está pasando haciendo de director-coordinador-mecánico de tres equipos y medio) al ver que la “enfermedad” también le ocurre a otra, decide subir el surtidor, del 55 de serie, a un 60… y ahí parece acabar el problema. Me toca correr.
Y corro. Y el vespi corre. Ya apenas hay frenos, pero por fin disfruto y dejo atrás a los que adelanto, sin preocuparme el motor. Y tanto gozo, que me sacan la pizarra y no quiero entrar… una vuelta más, sólo una… y se lo paso a Voromv que cumple la misión: finalizar la prueba.
http://fotos.subefotos.com/6d0db477b047ebcb267e6d4b459b336do.jpg
Mi amigo Voromv
Acaba la carrera, y todo son caras de felicidad, excepto las de algunos que se quejan de algunas motos. Así que se cumple la salomónica decisión de verificar todas las que terminan, por lo menos en tres puntos: neumáticos de calle, carburador de 12/12 y suspensiones de serie. Al final, la desagradable obligación de excluir a cuatro equipos. Por lo menos, todos han participado… pero seguro que escuece ver como se te escapa el podium…
http://fotos.subefotos.com/e2dfd3d80e42d8f4d7e102021fe1171do.jpg
"To Veneno Corse": Toni, Voromv y yo
Pero la cosa todavía no acaba ahí, y después de recoger y comer, toca el estudiar el cuentavueltas definitivo y la confección de diplomas. Y me voy por fin, con mi diploma y el de Toni, que nos acredita como novenos… jolín, otra vez noveno… Si no nos hubieran tirado en la primera vuelta, si no hubiera fallado el motor, si hubiéramos tenido un poquito más de frenos, si…
Y en casa, bajando el vespi, todo más claro. Relevos más largos. Frenos mejores. Un filtro de gasolina bien gordo, y otro preparado, por si las moscas. Y mejor decorada, que esta vez no resulta nada atractiva. Porque mi mente ya está en la siguiente cita. Como la de todos nosotros.
EPÍLOGO:
EN QUÉ ACERTÉ Y EN QUÉ FALLÉ.
Toca repasar mis miedos y dudas del domingo de madrugada. Y lo haré como lo escribí, por grupos.
-Mi primer miedo era que se perdiera la inocencia de la primera prueba. Fallé… y acerté.
La gran mayoría volvió a acudir a pasárselo bien, y se lo pasaron muy bien. Me alegraba ver la cara de felicidad de la mayoría, y esa cara picarona de los debutantes… como bien comenta Tino, y le dije a mi amigo Maracolo: como el primer polvo. Y encima, sin lesiones de gravedad… aunque alguno ya va escayolado.
Pero también acerté en el ánimo excesivamente competitivo de algunos. Gente comentando el ritmo de algunos jóvenes. Otros comentando sobre la ilegalidad de algunas motos. Solo eran unos pocos, pero se estropeó, en parte, el ambiente.
Sobre la juventud solo decir lo que dicen nuestros ancianos ¡quien la pillara! Porque tengo claro que otro ritmo hubiera llevado si me coge con veinte años…. Pero claro, el problema estaba en que los jóvenes son más arriesgados, tienen más tiempo libre y están más acostumbrados a llevar y afinar ciclomotores y, claro, una cosa se juntaba con la otra ¡e iban como cohetes! Y yo que he visto como se preparaban los aparatos en “Zape Endurance Team” tenía claro que, simplemente con las pruebas que hacían con rodamientos, tubarros y neumáticos, de ahí saldrían unos pepinos, legales en cuanto a reglamento, pero afinadísimos de prestaciones… y no me equivoqué. Los cuatro funcionaban divinamente, pero luego el peso de nuestra edad y cuerpos no nos permitía sacarles el rendimiento posible a nuestro F-9… que, por si no lo sabéis, también era del grupo.
Todo ello llevó a descalificaciones, correctas en temas como carburador, manillares, o amortiguador hidráulico, y más justa con el amortiguador regulable pero sin retención… ahora, el reglamento lo ponía claro, y al final cuatro fueron los “sacados fuera de lista”, dos de ellos entre los cinco que dieron más vueltas. Lo bueno es que veo, hoy jueves, que por lo menos uno de los afectados se lo toma con deportividad y ¡ya está pensando en la siguiente prueba!. Que no cambie para la próxima.
-Mi siguiente miedo giraba sobre el ir de “piloto oficial”, esto es, que el vespino venía directamente de “Zape Endurance Team”, donde Adri, Jesús y su cuñado estuvieron evolucionando cuatro aparatos. En nuestro caso, llevábamos depósito elevado (y aun así dio problemas), correa y rodillos de variador, neumáticos nuevos, estriberas en vez de pedales y algo más de aligeramiento. Pero ya digo que, aunque pasé bastante por allí (que pesao) y la toquetee un poco, me faltaba mi toquecito… que tuvimos que hacer de prisas y corridas antes de carrera, en vez de entrenar. Y claro, eso con mi carácter en cuanto me pongo nervioso no va bien. Voces, gestos, palabrotas… y lo que más me fastidia es que se me pasa así como llega, pero el espectáculo ya está dado. Por suerte Jesús demostró no solo ser un buen amigo y un mejor mecánico, sino además tener una paciencia infinita. Gracias a todos los que integráis el equipo por soportar mis estupideces. Ahora, eso sí, no vuelve a salir el vespi de mi casa hasta que no tenga un aspecto digno… que soso y anodino está, por favor, sobre todo comparado con el look anterior. Imperdonable. Y, por supuesto, con las presiones ajustadas a mi gusto…
-En cuanto a correr fondón… al principio iba un poquito agarrotado, la verdad, pero el último relevo, entre que el vespino ya no volvió a fallar y yo estaba caliente, me lo pasé estupendo, adelantando a bastantes… y siendo adelantado, por supuesto. La epicondilitis apenas me molestó y, la verdad, me quedé con las ganas de rodar otras dos o tres tandas… ¿una carrera a seis u ocho horas? ¿y porqué no? La verdad es que mientras el cuerpo aguante y no quede el último destacado, tengo ilusión para rato… y cuerpo, que esto no es moto-cross. Ahora, eso sí, debería perder un mucho de peso… el pobre 50cc me lo agradecerá seguro…
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-El miedo escénico lo llevé mal… apenas pude atender a mis tíos y primo, y suerte que no vino nadie más. Lo de la atención a mi familia por desgracia lo imaginaba, porque una vez te pones en faena, y aunque tienes rato entre relevo y relevo, los fallos de nuestro vespi no me permitieron relajarme y disfrutar de su compañía… menos mal que me conocen de toda la vida. Gracias por el apoyo y las fotos.
-Lo de los 42 años ya lo he comentado antes ¡Hasta que el cuerpo aguante! Es estimulante seguir pegando hachazos y ver que no eres de los malos… porque de los mejores no he sido nunca, pese a lo que dicen algunos. Por cierto, mis hijos me han regalado “Un mundo sin fin” de Ken Follett. Magnífico. Si solo es la mitad de bueno que “Los pilares de la tierra” me doy por satisfecho.
-Y por último, por suerte solo nos llovió de camino y de vuelta… y nada en la pista. Tuvimos suerte, y mi dolorido hombro lo agradeció. Que malo es hacerse mayor.
Me veréis en la siguiente. Seguro. M.
La historia en gripaos.com (http://gripaos.superforos.com/viewtopic.php?t=207) y en mundotrail.com (http://www.mundotrail.com/phpbb2/viewtopic.php?t=2959&start=0&postdays=0&postorder=asc&highlight=)... y la opinión de la gente.