Como viene siendo habitual hemos hecho la travesía anual clásica entre las clásicas Barcelona - Andorra 2007. Esta vez hemos tirado la casa por la ventana y se ha intentado hacer una cosa bien organizada.
Parece que todo salió bien, a pesar del infierno blanco final. Tras 250 km de montaña por una ruta nueva (diseñada por Terrakan y por mi) y poco asfalto encontramos nieve y hielo en la cota 2000 y algunos como yo lo pasamos fatal al llegar de noche y quedarme sin batería de la moto en medio de la montaña. Alguien me debe haber echado mal de ojo… pero estoy muy satisfecho de haber acabado el track, ya que las otras veces no la hemos acabado entera por montaña y ha habido que coger carretera.
Lo más significativo es que nos hemos juntado los dos mejores foros de moto de montaña a nivel de España, como han sido Embarrados.com y Motostrail.com, y a nivel catalán, como ha sido Trailcatalunya.com y el del grupo Intrèpids. La unión hace la fuerza.
Nos juntamos, si no me equivoco, 18 motos que tuvimos que dividir en tres grupos, y cabe destacar que no hubo ninguna incidencia grave ni leve, aparte de algún moratón y algún espejo roto por culpa del hielo.
Salimos antes de amanecer bastante puntuales todos los grupos con la intención de llegar a buena hora a comer a Ponts, que era el punto previsto para reponer fuerzas. Partimos con algo de lluvia que poco a poco fue escampando y por eso las pistas estuvieron bastante bonitas y divertidas.
Como era muy pronto estaba medio dormido y me equivoqué un par de veces para seguir el track, pero nadie se quejó –más les valía-.
Me falló el GPS más tarde y fue Isma quien tuvo que hacer de guía.
A medida que ibamos haciendo kilómetros las pistas aparecían secas y polvorientas y con unos paisajes impresionantes.
Toni bajando una trialerilla
Isma y TBO siguiendo a Nina por la misma trialera
Mioli bajando con su veterana ST
Nina aprovechando el descanso para retocarse el maquillaje
Llegamos al objetivo a buena hora para almorzar y encontramos al grupo que nos precedía que salía de allí, menos dos que se quedaron con nosotros, Albert_Iscle y su amigo que no recuerdo su nombre –I’am sorry-.
Una buena butifarra y TBO mirando sorprendido
Bonitos paisajes
El grupo echando un cigarrillo antes de subir por el camino de las piedras donde te podían saltar los empastes
La puerta del Pirineo
Descanso en todo lo alto
Seguimos rumbo a Andorra
Cae la tarde y el infierno blanco nos espera y nosotros sin saberlo
El paisaje de postal, pero la nieve no presagia nada bueno a esas horas. Pensábamos que sólo había nieve en la cota más alta, pero nos equivocamos, porque la bajada estaba en la umbría y conforme se hacía de noche aquello se helaba más y más. Tardamos en hacer 8 km dos horas y yo me quedé en medio de la montaña sin fuerzas y sin batería y de las caídas con toda la ropa mojada. No teníamos alternativa, había que bajar de ahí como fuese. Una castañada antes de hora y con el resultado de unos cuantos boniatos en todo el cuerpo… eso sí, la DRZ, batería aparte, ni se quejó.
Quiero agradecer a Mioli las cincuenta mil veces que subió y bajó a bajarme la moto –me resbalaba la suela de las botas y no había forma de echar pie a tierra- y encima no tenía tabaco. Debo confesar que nunca lo he pasado tan mal en moto.
Valió la pena sufrir para llegar a este momento en que olvidas lo mal que lo has pasado. Aquí quiero dar las gracias a Snowbiker, Patricia, Manchi y Mariángeles, ellos ya saben por qué, que habíamos quedado con ellos para cenar en el hotel donde nos alojamos.
En definitiva, un fin de semana para repetir… ¡eso sí, sin los últimos 8 km!
Reunir a tanta gente estupenda fue precioso y muy en especial a Tbo y Toni, que se marcaron el viaje de ida y vuelta de Madrid adicional para hacer la ruta con nosotros. Esperamos no haberles defraudado.