Este sábado no quedó más remedio que salir solo a dar una vuelta por el campo, la idea era ir alternando caminos conocidos con desconocidos, a ver qué me encontraba. Mi destino, un pueblo que queda al norte; hoy toca visita. Empiezo el día temprano para ir sin prisa, preparo el almuerzo, me abrigo bien, y me echo al monte, que me espera una buena kilometrada.
* Para empezar el día elijo un pinar que tengo al lado de casa; aquí hace menos frío que al raso y además los arenales ayudan a entrar en calor. La moza quiere guerra:
* Aun así encuentro hielo:
* La semana pasada llovió bastante por aquí, así que durante todo el día me voy a encontrar buenos barrizales:
* Primera sorpresa de la mañana, hace tiempo aquí había un camino. Hay roderas de tractor pero no sé yo ... Allí al fondo acaba la tierra y sigue el susodicho:
* Lo intento pero aunque no imposible está complicado y como voy solo paso de quedarme atascado. Me toca dar la vuelta con unos kilos de más
* Seguimos, por esta zona de golpe la tierra cambia a tonos rojizos, aunque en la foto no se aprecie.
* Este río que nace aquí al lado está seco, nada que ver a cómo llega a tierras pucelanas:
* Ya llevo un par de horas de barro y toca parar a almorzar un poquillo en esta ermita. El silencio del lugar se rompe con unos cuantos disparos.
* Ya que estamos, decido explorar un poco esta zona:
* Y continúo mi camino por una empinada bajada con un barro arcilloso y pegajoso que a poco me hace acabar en el suelo. Esto parece patinaje artístico ...
* Después de mucho tiempo sin atravesar ni un pueblo llego a la civilización, y un poco más tarde me dirijo a un valle que a los compañeros burgaleses sonará:
* Aprovecho a darle al mango por estas pistas y ganar algo de tiempo. Más adelante, puedo ver la sierra, que lamentablemente hoy no podré visitar:
* Por aquí las pistas están perfectas:
* Paso por la iglesia románica de un pueblo que pasó de ser 'De los Caballeros' a 'Quemado', gracias a un incendio.
* Intento frustrado de ver una ermita curiosa dentro del monte ya que están de batida. Así que sigo, y al fondo está mi destino:
* Cañita y de vuelta a casa a comer. He sido malo, he vuelto un buen trozo por carreterapero como alguno dijo ya para eso tenemos una trail. Pero a 30km de casa el monte me llama y vuelvo al jaleo. Subidas y bajadas embarradas a la carta. Los tramos más peligrosos son estos en los que se hace una fina capa sobre duro:
* Descubro rincones que no conocía y que espero repetir con más calma, que se me hace tarde:
* Por fin llego a mi monte: estoy a salvo
Un saludo
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