Después de las 4 gotas que han caído esta noche, la mañana es perfecta para salir en moto y pasar el día en el monte. Iniciamos la ruta por el camino de costumbre y conforme vamos ganando altura para subir a la sierra, la primera parada es obligatoria para admirar el paisaje que vamos dejando a nuestras espaldas.
Luego vendrán caminos rodeados de pinos.
Unos cuantos kilómetros mas adelante y después de un buen rato sin parar, elegimos el peor sitio para hacerlo, sin ninguna protección y ya a bastante altura, el aire frío pega con fuerza.
Se va haciendo hora de comer y nos acercamos a un pequeño pueblo. Como teníamos previsto, antes de comer nos vamos a un albergue que han abierto no hace mucho. Queremos conocerlo y hablar con el dueño, pero ........ nuestro gozo en un pozo, esta cerrado. De todas formas contactaremos por teléfono y en breve habrá noticias para el que se quiera acercar por estas tierras en el mes de Enero.
Un par de huevos fritos con panceta y un rico postre casero que no me da tiempo a fotografiar es nuestra comida, esto es lo que sobró.
El pueblo es muy pequeño pero muy bonito.
Seguimos ruta, ahora tocan caminos con un poco mas de barro pero muy divertidos
En esta zona nos encontramos con dos traileros a lomos de una V-stron y una Dominator que andaban un poco perdidos. Al final de la pista unos km mas adelante les esperaban tres amigos y sus tres GS Adventure que habían preferido ir por carretera Después de indicarles el camino hacia donde querían ir y aunque coincidía en unos km con nuestra ruta, nosotros seguimos adelante, ya no había mas cruces para perderse y debido a sus ruedas prácticamente de carretera preferían ir mas despacio.
Al final de la pista estaban las tres imponentes Adventures y sus dueños. Cigarrito, un ratito de charla con ellos y seguimos nuestro camino.
Ahora toca ascender por una bonita pradera
Y después de un tramo con bastante barro y rodadas.........
bajamos de las alturas por un camino sin apenas vegetación, pero con bastante mejor piso que el anterior.
Si el sol os lo permite, aquí podéis ver una manada de caballos galopando.
La tarde se va echando encima y los siguientes caminos que cogemos van siendo de vuelta a casa.
Y como siempre, esta vista con el Moncayo al fondo, nos indica que en diez minutos estaremos debajo de la ducha.
No dispongo de tantos datos de la ruta como nos da Trencaterros, que por otra parte ya me gustaría, solo sé que han sido 174 km en más de 6 horas de moto.
Un saludo y nos vemos en la próxima.