Casi sin pensarlo, me he levantado esta mañana y he hecho esto:
Vista del Pantà de Terradets
El pantano en toda su amplitud.
Los primeros avistamientos de nieve
Y llego a Tavascán, donde el grosor de nieve es considerable y donde me encuentro con una manada de caballos en dirección contraria.
La manada pasa mientras me paro para sacar la foto pero llego a tiempo de retratar al último.
Que me adelanta tímidamente...
Y sale al trote. No sé si tenía más miedo él o yo! Por poco me suelta una coz!
Y me paro en esta curva, con más nieve y con una sorpresa.
E aquí a la sorpresa, a ver si adivináis que es... a veces la naturaleza es generosa.
Y llego a las pistas de ski de Tavascán. Unas pistas que pocos conocen y que como siempre, prácticamente desiertas. Es como tener unas pistas de ski privadas.
Esta es una zona de puente medievales. Este es el de Tavascán que data del s.XII.
Mi objetivo era Tor, pero me he encontrado la carretera cortada por obras y he decido visitar Noris, que como dice el letrero: hace más de 1000 años que está allí.
Más vistas desde Noris
Y tras una breve conversación con un lugareños, sobre las precipitaciones, la sequía... sigo camino de vuelta.
No me iba a ir sin pisar lo marrón! Me dirijo al Plà de boet.
Y de nuevo mi gozo en un pozo... la nieve me impide proseguir.
Y para finalizar, al llegar a casa me encuentro esto.