El sábado pasado estuvo todo el día lloviendo, así que hay que aprovechar el domingo, un dia fresquito y sin nada de polvo en esta época del año es todo un lujo. Además había que probar el nuevo desarrollo que le hemos puesto a las djebel con cinco dientes más en la corona.

Enseguida ponemos rumbo a la sierra, esta vez por un camino que en poco más de 4 km pasas de 900 m. de altitud a unos 1.500 m., un autentico rompebrazos si lo subes a buen ritmo, ya que el camino esta en muy mal estado.


















La ultima rampa no se que desnivel tendrá, pero hay que cojerla con decisión y sin salirte del camino, cosa complicada por que a la fuerte pendiente hay que sumarle los escalones que tiene y el pedregal que hay alrededor. Esta vez a mi se me atraganta y tengo que volver a bajar e intentarlo de nuevo.




Ya estamos arriba.






Y ahora toca seguir el camino, pero esta vez hacia abajo.








Aprovechando que hay que repostar nosotros también tomamos un pequeño tentempié.






Y pronto estamos de nuevo en marcha.


















Hay que cerrar las vallas para que no se escape el ganado.










Al cambiar el kit de transmisión se me debió olvidar apretar bien los tornillos y el
guardacadenas se suelta, menos mal que el amigo Chato lo ve a tiempo y lo solucionamos rápido.
















En un cruce paro para hacer unas fotos cuando aparezca la pareja.




Y cuando me canso de esperar vuelvo en su búsqueda. Una pequeña caída de Eduardo y la maneta de embrague a tomar por c***.










Solucionado el problema seguimos adelante y por fin hago las fotos.






Aligeramos un poco el ritmo ya que los percances nos han retrasado un poco.






Tras un buen rato sin parar llegamos a uno de los bosques que mas me gustan de esta zona.














Hay bastante humedad y numerosos charcos, en unos de ellos me doy un buen susto al pasarlo rapidito sin darme cuenta de que es mas profundo que lo que pensaba. La moto se frena de golpe y casi salgo por las orejas, la ducha que me doy no tiene desperdicio.














Este el culpable, parece pequeño pero tenia sorpresa.




Eduardo ha salido con el amortiguador trasero bastante tocado y a estas alturas del dia va prácticamente solo con el muelle. El Chato se sorprende de lo que “baja” la djebel con el amortiguador en ese estado.




Salimos del hayedo y los charcos se suceden uno tras otro.








Vamos bajando de la sierra, la hora de comer ya esta más que pasada.








Así que nos tenemos que conformar con lo que nos quiere sacar el dueño del bar.












Y después de “malcomer”, vuelta para casa ya prácticamente del tirón.
















El amortiguador de Eduardo ya no da para mas y parece que va en un dos caballos en vez de en una moto, así que unos 15 km antes de llegar a casa dejamos los caminos y nos vamos por asfalto. No sé como ha hecho para ir en esas condiciones.
En total 170 km y un dia estupendo para andar en moto.

Por ultimo comentar que el nuevo desarrollo que hemos montado en carretera se queda un poco corto, pero en el monte es una autentica gozada lo bien que va.

Saludos y hasta la próxima.