Qué ganas teníamos mi hermano y yo de coger las motos y pegarnos un buen tute de moto, de salir y no tener que preocuparte por llegar a casa por la noche dejando ese camino que te gustaría investigar. Eso no es cosa fácil, pues las parientas no siempre están dispuestas a dejar que sus parientes pernocten fuera del nido cuando a ellos se les antoje. El caso es que después de los trámites burocráticos con dichas parientas, recibimos permiso para pasar el puente del 1º de mayo de ruta con las motos. ¡¡ Cómo mola, nuestra primera salida de más de un día!!
El plan era recorrernos la Sierra de Cazorla, Segura y las Villas y alternar caminos y asfalto y dormir en camping o donde sea.
Salimos el Viernes por la mañana, dirección La Puebla de Don Fadrique, con más fresquito del que esperábamos y con amenaza de lluvia, la tia del tiempo (ya no es un tio) se equivocaba. Como mi hermano se puso la chaqueta de verano y empezaba a chispear, se puso un poncho de esos de los veinteduros, primera paradita.
Pasamos por al lado de La Sagra, 2382m, uno de los puntos más altos del sureste español después de los picos de sierra nevada y que con la nieve que le quedaba ofrecia una imagen ballísima:
Proseguimos entre chispeos y bastante fresquete, y nos encontramos con dos equinos en medio de la carretera, uno bastante curioso y al que parece le gustó la pegaso que conduzco (claro, como pegaso era un caballo con alas…..)
Algunos kilómetros más adelante, muy cerca ya de Santiago de la Espada divisamos desde la zigzageante carretera un arroyo que pasa por un camino, y decidimos hacer nuestro primer vadeo del viaje:
Proseguimos la marcha, paramos a comer en un pueblecito llamado La Matea y con el buche lleno y ganas de trailear por tierra empezamos un tramo de pista que nos llevará casi hasta cerca de Cazorla, unos 70 kilometros de pista a veces buena y a veces no tan buena, pero que transcurre por parajes muy poco transitados, bonitos y a bastante altura.
Avanzamos por este camino por el que mi hermano y yo disfrutamos como cochinos, vamos perdiendo altura y entramos en una zona más boscosa:
Hacemos una paradita pa echarle una foto a este peazo pino, a saber cuantos años tendrá . Observamos también una fila de gusanos a lo ancho del camino; son los que hacen las bolsas esas en los pinos y que por esta zona son una auténtica plaga. Anduvimos por zonas en las que cientos de pinos estaban totalmente secos por los bichos estos, por eso no me dio cuidao pasar con la moto por encima de ellos, cabrones comepinos.
Joer como mola este sitio, por donde mires las vistas son grandiosas y según dice mi hermano que ha estado en los Picos de Europa, no tiene mucho que envidiarles:
La pequeña anécdota de este tramo es que al ir un pelín mas adelantado que mi hermano , me meto por campo a través pa flipar un poco y el pasa de largo y no me ve, y yo tampoco le veo pasar. El caso es que pasan los minutos, avanzo por la pista y no nos vemos. Lo espero creyendo que ha parado a….yo qué se, pero no llega. Decido continuar pensando en que iría delante y así fue, el payo le estaba arrimando estopa a la bmw pa ve si me cogía y resulta que yo iba detrás. Menos mal que preguntando a unos senderistas me indicaron que el había pasado ya por ahí y no me toca otra que arrimarle yo a la pegaso pa ver si lo alcanzo. Al final nos encontramos y proseguimos la marcha después de un pequeño rapapolvos por mi parte.
Así terminamos el tramo off y un poco más tarde encontramos un camping con buena pinta y decidimos acampar ahí mismo:
El camping estaba justo al lado de un río y hacía un helor por la noche de la ostia, me levanté a cambiarle el agua al canario y el termómetro de la moto marcaba ¡¡ solo tres grados!!. El pobretico de mi hermano se tuvo que poner la ropa de la moto del frio que tenia, pues su saco era bastante cutrecillo. Entre el frío, el no estar aconstumbrado a dormir en el suelo y mis sonoros ronquidos, el pobre pasó mala noche según me contó. Yo por mi parte, solo acusé lo duro del suelo y el no tener almohada. A pesar de todo, al dia siguiente amanecemos despejamos, desayunamos copiosamente, recogemos los aperos y reanudamos la marcha, ahora por carretera.
Para el que se conozca la zona, estamos muy cerquita de Vadillo Castril, y cogemos la carretera que va hasta Coto-Ríos y llega hasta Siles, Riopar, La Puerta de Segura,..etc. Bonita carretera, pero plagada de coches que obligan a ir con cuidadito. En el trayecto pasamos por una zona arrasada por un incendio en agosto de 2005, que acojone tuvieron que pasar, con la cantidad de monte que hay por ahí.
De 22.Cazorla, 1,2,3 -05-09
Tambien pasamos por zonas con muy buenas vistas hacia los inmensos olivares de Jaén
Para la hora de comer estamos al lado del embalse del Tranco de Beas, donde paramos en Bujaraiza a tomar unas tapas (por aquí te pides una cervecita y te la acompañan de una tapa)
Antes de llegar a Cortijos Nuevos nos llama la atención un monte en cuya cima se ven unas antenas, y si hay antenas ,hay camino. ¿Por qué no subimos? …….pues vamos pa´rriba
Refrescandonos en una fuentecilla en El Ojuelo, antes de llegar a lo alto
Y cuando llegamos a la cima, nos quedamos flipados de las vistas tan buenas. El monte este se llama El Yelmo, tiene 1755 m y es un punto de despegue de parapentes. Como hace un dia claro, se pierde la vista en el horizonte, una de las mejores vistas que he tenido nunca.
En esta se ve el embalse del Tranco y toda la zona por donde venimos por la mañana
Y en esta se ve La Sagra, al fondo, un poquito a la izquierda
Y por aqui es por donde se tiran los de los parapentes, hay que tener un par de guevos
Incluso nos planteamos el quedarnos a dormir en este albergue, pero entre el frio que pasó mi hermano la noche anterior y que todavía nos quedaban algunas horas de luz, decidimos seguir ruteando
En algunos puntos habia unos cortaos que daba yuyu asomarse
Nos montamos otra vez en las máquinas y… todo lo que sube , tiene que bajar…
En lugar de volver a la carretera de Cortijos Nuevos y como no llevamos ruta predefinida, nos metemos por una carreterilla secundaria que pasa por varias aldeas.
Nos encontramos con rincones chulísimos y la carretera no tiene tráfico ninguno
Y en esto que vemos un camino que va hacia un riachuelo y bajamos a ver si hacemos un vadeo y, vaya si lo hacemos, yo casi me pongo en remojo, faltó un pelo. Aquí pongo el video de mi hermano, como no se ponerlo directo os pongo el enlace:
http://picasaweb.google.es/lh/photo/EZkx3RdLJFzc9D6GQiWoHg?feat=directlink
Empieza a oscurecer y después de hacer bastante el cafre por el riachuelo este, empezamos a preocuparnos un poco por dónde vamos a pasar la noche. En una pequeña aldea nos dicen que por aquí no hay ningún camping pero que en la aldea La Toba quizá encontremos alguna habitación en una posada. Pues para allá que vamos. Llegamos a La Toba y justo al final de la aldea, cuando parece que en ese pequeño lugar no hay nada ni nadie, encontramos el sitio que nos habían dicho.
La ostia que sorpresa nos llevamos cuando entramos al bar, resulta que toda la gente de la aldea estaba allí metida viendo el Real Madrid-Barça, por eso no había nadie en la calle. Por cierto, y aunque no me gusta el fútbol, vaya paliza le metieron esa noche al Madrid; cuando me lo dijo un crio en la calle no me lo creía.
Allí pasamos la noche de puta madre, nos dejaron un apartamento por 40 pavos y mi hermano agradeció no tener que soportar mas mis ronquidos pues teníamos una habitación para cada uno.
Al dia siguiente, después de unas buenas tostadas en el bar reemprendemos la marcha dispuestos a seguir disfrutando de las amotos. Nada más salir de la aldea La Toba nos encontramos con una pista con muy buena pinta, y sin saber a dónde nos llevará la cogemos ¿no dicen que todos los caminos conducen a Roma?
Otra vez andamos por caminos altos que nos ofrecen muy buenas vistas, en esta foto se ve La Sagra otra vez
Y un montón de cumbres nevadas, zona por la que transcurrió nuestra primera parte de la ruta
Esta subidita, en la foto no parece nada, pero con ruedas mixtas y las piedrecitas sueltas se atraganta un poquito
Pero merece la pena llegar a lo alto. Justo debajo de nosotros está la aldea donde hemos pasado la noche
Y seguimos pisteando por zonas altas. Aquí todavía hace fresquete
Una paradita , como otras tantas y tantas
Fijaos en los pinos que hay en el fondo del barranco, como para caerse aquí
Y como ya creo que os estaré aburriendo con tanta foto, pongo la última de la pedregosa pista por la que transitábamos a medio dia del domingo. Al final, y después de un buen tramo de carretera secundaria fuimos a parar otra vez a parar a donde comimos el primer dia, a La Matea, al lado de Santiago de la Espada. Con algo de tristeza por acabar ya nuestra gran salida, pero algo cansados empredimos el camino de vuelta a casa, a Bullas.
Espero que os haya entretenido esta, mi segunda crónica en Motostrail. Al final, aunque cueste ponerse, se le coge el gustillo a esto de contar las saliditas. Hasta la próxima.
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ásalo a crÓnicas de salidas antes de que se enteren los demás foreros.Que luego :crac: :crac: 
