El sábado Mc-guiver, me mandó un correo avisándome de que había quedado con un grupo para ir desde Torrelaguna hasta Riaza. La cosa tiene un pintón espectacular, al final nos juntamos 2 transalps, una Djebel, una KTM, una WR450 y mi Tenere. Es la primera vez que salgo con ellos, así que ya sabéis, después de un frugal desayuno, salgo con los típicos nervios acerca de como iran y esas cosillas.
El guía en este caso es Janb y va con una transalp y con los enduro 3 y la verdad es que pienso para mis adentros en como estaría el patio de barro y me digo, este guía está loco. Pero el guía este no es guía porque si, si no porque debe llevar dos millones de años haciendo pistas y se notaba que se las conocía como la palma de su mano. Así que el principio de ruta va limpito de barrazo del gordo, del que te revienta los guardabarros. De momento la cosa pinta muy bien...
El ritmo inicial es rapidillo pero sostenible, al menos para mi, aunque en ciertos momentos tengo que apretar el culo, pero según el guía vamos de paseo, jajaja; no me quiero imaginar lo que puede llegar a dar de si Janb, con una moto de enduro y ruedas de taco, jajaja. En mi defensa he de decir que yo iba conduciendo la moto como si llevara ruedas mixtas, no obstante a medida que fue transcurriendo la ruta, me fui encontrando mucho más cómodo con los tacos y con la ruta.
No hay muchas fotos de la crónica porque el grupo tiene claro que aquí a lo que venimos es a montar, no a hacer fotos :twisted: . Yo me siento cada vez más cómodo y otros también, aunque alguno al final se puso tan cómodo que acabo comprando una parcela, afortunadamente sin ninguna consecuencia...
Llegamos a un puerto de montaña offroad con curvas de primera, que me ha dejado enamorado, ese hay que repetirlo, una gozada entrar en las curvas cerradas con los tacos y derrapando a gusto, me lo he pasado como un enano :twisted:
De repente y sin esperarlo, ya que no pasamos por el Vado, llegamos a la Vereda, por fin!!!!!!!! Creía que nunca llegaría este momento
La Djebel está preciosa...
Y yo estoy feliz como una perdiz...
Continuamos por pistas hasta Tamajón, donde nos tomamos un merecido descanso a la par que unos buenos bocatas. Hago una última foto a nuestra manada de caballos y cierro un día estupendo...
Definitivamente la vida es bella...
PD. Me encantaron las gafas de enduro amarillas que lucía orgullosamente ziervo desde hace más de 15 años y es que como dicen algunos por aquí, lo importante no es la flecha, si no el indio...
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