A los de costumbre, Edu, Chato, Cacheno y yo, hoy se nos ha unido en parte de la ruta Fernando, que aunque lo que le va es el enduro, hoy se ha juntado con los abuelos para hacer una toma de contacto, ya que vendrá a la invernal.

Salimos por la puerta de costumbre y poco después a Edu y a mi no nos sigue nadie.





Damos la vuelta y por el rastro que hay en el suelo alguno se ha puesto a buscar margaritas en pleno mes de Febrero, cuando todos sabemos que hasta la primavera no florecen.





No diré de quien se trata, pero ahí va una pista.





Después de unas risas seguimos adelante.































Nieve en las sierras sorianas.









Repostamos en San Peter, como diría el amigo Cacheno, y Fernando nos abandona, ya que vuelve a comer a casa.
Nosotros seguimos hacia cotas más altas.

















Un cigarrito que ya llevamos mucho rato sin fumar.





Mientras este nos da la espalda.





La montaña de enfrente será nuestro objetivo a final de mes.






Que bien le sienta la Bmw al pijo del Chato verdad?





Hacia dias que no se veían, pero se siguen queriendo igual.






Bueno, mariconadas las justas, así que vámonos.

Unos km. más adelante y cuando vamos a coger el camino que desciende al valle………… “quietosparaos”, tiros, perros, gentes con escopeta, “mecaguento”, batida de caza.
- si queréis pasáis, pero está todo el camino lleno de escopetas
- quita, quita, que a final de mes hemos quedado con unos amigos y hay que llegar a la cita.

No nos queda otra que des-andar los más de 20 km. que llevamos de pista.





A la ida se nos había escapado esta imagen del Moncayo por tenerlo a la espalda y gracias a los cazadores ahora lo tenemos enfrente, no hay mal que por bien no venga.








Terminada la pista de ida y vuelta, un poquito de carretera y a almorzar.















A Cacheno se le ha hecho tarde, tiene obligaciones bastante más importantes que andar dando tumbos en moto con nosotros, desde detrás de los cristales le decimos adios.







Nosotros también volvemos hacia casa pero lo alargamos un poco más.











Ya atardeciendo y desde un alto nos despedimos del Moncayo que hoy tiene una estampa acojonante.











Y por la misma puerta de salida, entramos de vuelta.





Según la teneré 160 km. “clavaos”, según la moto pija 152, ó yo alargo más las trazadas, ó Edu las acorta, ó la teneré miente, ó la moto pija no dice la verdad. En cualquier caso, sean los que sean, los hemos disfrutado a tope como siempre.

Un saludo y hasta la próxima