De nuevo nos hemos vuelto a reunir con los de la capi, están por la zona de fin de semana y no hay que desaprovechar la ocasión. Después del sábado un tanto accidentado y la baja de un compañero, el domingo quedamos con ellos para disfrutar de una jornada trailera.
A primera hora salimos hacia el punto de encuentro.
Estamos todos?, pues vamos que nos vamos.
Subiendo y bajando montes nos presentamos en esta línea de eólicos.
La bajada desde los molinos hasta este pueblo de lo más divertida.
Un poco más adelante aprovechando un pequeño enlace por carretera
algún cobarde abandona (léase con sentido del humor y sin la más minima intención de ofender a nadie, pero ser lo sois), y ponen rumbo a casa. Parece que el “trasnocheo” y las motos son incompatibles. Los demás seguimos a la faena.
Un caminito divertido y casi sin ninguna piedra nos lleva a esta bonita cumbre.
A estas horas los estómagos suenan más que los escapes de las motos, o nos vamos pronto a echar un bocado ó alguno me cuelga de un pino. Así que a buscar un refugio cercano.
Chorizo y lomo como para una boda, como en los viejos tiempos.
Aunque alguno se tiene que conformar con un biberón y algo de verde.
La siesta después de comer es sagrada, verdad Ignacio?
El chiquitin ha vuelto hacer otra de las suyas, y mientra comíamos le ha decorado la moto al Chato.
No se estaba nada mal a la sombra de los pinos, pero hay que seguir adelante.
Breve descanso para rellenar agua y para el cachondeo, daban ganas de darse un baño.
El Chato estuvo a punto, pero no hubo suerte.
Hala que ya queda menos.
Y llega la hora de la despedida, después de las lágrimas, los besos y los abrazos, nos despedimos de la gente de la capital y partimos en dirección contraria rumbo a casa.
Al igual que ha ellos, aun nos queda camino por recorrer, pero lo hacemos prácticamente del tirón.
Hoy nos hemos pegado una buena sesión, 241 km y casi 10 horas encima de la moto, vamos que hemos llegado reventados, pero ha merecido la pena “muy mucho” compartir el dia con esta gente tan estupenda.
A vosotros os digo, si a vosotros los de las motos pijas,………… me lo he pasado en grande, y como siempre que hemos coincidido, ha sido un verdadero placer subir y bajar montes, esquivar piedras, pisar charcos, tragar polvo, partirme el culo de risa, etc etc etc, a vuestro lado, que lo sepáis. !!Con vosotros al fin del mundo!!.
Un saludo y hasta la próxima.
P.D. Espero que el compañero accidentado se recupere lo antes posible y pronto este al pie del cañón, que esa Dakar esta pidiendo guerra.
P.D.2 Se me olvidaba, aviso a navegantes, si alguien quiere una 800 amarilla que sepáis que en Logroño las regalan.
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ya se ve que las temperaturas ahora prestan a eso, como siempre una estupenda cronica y con buen ambiente.
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