Este fin de semana he disfrutado de lo lindo con dos de mis aficiones favoritas: la música y las motos. Y he tenido el gusto de ver una peli (de motos) que me ha sabido a gloria.

Empecemos por el sábado tarde cuando cogí a "la gordi" (mi Suzuki Big 750) y fui al puerto de Valencia a gozar del concierto de mi grupo de rock duro favorito: La Dama de Hierro, Iron Maiden.

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Inmejorable compañía la de Lorena y Marcos.

El concierto no estuvo mal, pero la verdad es que se me hizo corto. ¡Faltaron miles de canciones que corear! En todo caso, el espectáculo estupendo.

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Al día siguiente me ve un amigo y me pregunta porqué no estoy en la Reunión de Motos Clásicas de Torres-Torres (a apenas unos kms de donde estamos)... leche, si lo sé lavo la gordi y la luzco, que ya empieza a tener un huequecito por ahí. Total que me lía y nos vamos para allá. Solo voy a poner unas pocas fotos para no hacerlo excesivamente largo, pero os podéis hacer una idea...

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Bultaco Metralla.... ahhhhh.

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Y otra preciosa Saturno.

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Sanglas 400, con freno de disco "in-board" (dentro del cubo) y arranque a palanca.

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Impecable Cofersa...

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... y no menos esta Ossa GT

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Mi sueño de juventud, una Montesa Impala 2. Sobre gustos...

Y la cosa no acabó aquí, pues mi vecino me comentó que tenía una película que siempre he tenido ganas de ver... y nada mejor con estos calores que aprovechar el aire acondicionado, la cerveza y la picadita ajena...

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La peli supongo que muchos la conoceréis y, si no es así, no tardéis en verla. No solo por las bellas motos (y coches) de los ´60 que salen, sino por el estupendo papel que hace Sir Anthony Hopkins de un hombre grande como pocos: Burt Munro.

Un buen fin de semana, sin duda.