Vaya pos yo la verdad que no puedo contar demasiado pero como no es mi estilo os daré la brasa.
Mi historia de motero empieza mucho antes de tener moto,casi, mucho antes de nacer. Como ya he contado mi padre era un flipao que se dejaba las tardes y a veces ciertas partes del cuerpo corriendo carreras piratillas en los cerros de su barrio con una ducati senda 75.
Al nacer yo mi padre pensó en hacer de mi lo que Alberto puig hace de pedrosa.Mi madre se niega rotundamente a comprarme una motillo de cross.Yo como iba a mi bola pensando en los pitufos y espinete empieza a llevarme a ver carreras, como una en jerez de la que me acuerdo perfectamente de ver a aspar con la derbi de 80cc, y nada más por que me quedé dormido el resto del dia.Mientras tanto me entretenía con mi bh Gacela de la que no me bajaba ni pa desalojar de vientre (esto para desagrado de mi madre era cierto) y que lucia dos lustrosos ruedines.
Mi padre desistió y dejó que yo hiciese lo que quisiese.
Con lo de los cromos de coches me empezó a tirar la velocidad y mi padre vio la oportunidad de inyectar el virus en mi sangre llevandome a hacer tandas de karting cada vez que ibamos a la playa de vacaciones (Juro que vivia un año entero para disfrutar esos 30 minutos) Y comprándome una BMX que era una flipada de Orbea y con la que mi padre me enseñaba a tirarme de barrancos que yo veia como abismos, como se desaogó el capullo,así me pasa que ahora casi me divierte caerme.
Un dia algo colapsó mi mente, tocó de lleno en mi cerebro y me hizo ver la luz.Me monté en la FDS de mi tio que llevé muy de vez en cuando.Diós se que era una KK pero lo recuerdo como un conjunto de prestaciones y sensaciones inigualables.
Al rato estaba leyendome los centenares de MOTOCICLISMOS que tenia mi padre almacenados uno por uno desde el 73 hasta ahora,ya no pasaba de ver las carreras con el hablando del Ruggia, del Romboni de Giró del Suán y el Reini.
Al poco un amigo de mi padre le vendió una mountain bike de segunda mano que nos costo 7000 pelas. La flipé con esa bici, me recorría fuenlabrada y sus alrededores con mi camiseta de criville religiosamente todos los dias.Lo que aprendi con esa bici es impagable con respecto a lo que me costó. Los colegas primos etc. empezaban a tener moto via papi, yo opté por hacer lo mismo,akí mi padre me enseñó a trabajarme los sueños,a base de una beca de estudios y las propinas que recibia de la gente cuando iba a trabajar los veranos montando muebles con mi padre( a base de 500 y mil pelas me supuso mucho ahorro) me compre una bici de aluminio de las wapas.Con esta y un amigo tan grillao como yo haciamos medias de infarto y descendiamos por lugares y velocidades que nos hizo creyentes de la buenaventura.
Me robaron la bici y con ella la dosis de adrenalina que tanto me hacia falta.
Tras currar veranos,servir Hamburguesas,colocar almacenes infinitos y demás me he comprao la KLE.
Creo que sabeis lo que se siente,pero para mi fué como ganar un mundial y coronar el everest, por fin tengo una MOTOOOOOOOOO!!!!!!.
Siento si me he enrollado demasiado pero quería explicar que he sido motero toda mi vida aunque no tuviese moto,era simplemente un teórico.
Me ha gustado mucho tu historia Nina es la primera vez que oigo una historia así y mas por venir de una mujer, no se me hace mu común. Ole tú.
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