Bueno, bueno.
Tampoco es para tanto.
Si no, imaginaros los calendarios de Michelín, a este nivel habría que prohibirlos, y los que te dan de bolsillo en los talleres y bares.
De acuerdo que es un poco machista y sobretodo que se meten con las pobres rumanas, pero no hay que dramatizar tanto.
Al menos yo conozco a esta gente y como dice Enriquemt es gente legal y seguro que no lo han hecho con mala intención.