-
Tarfaya, 5 de agosto 2009. Quinto dia:
Estaba tan a gusto acostado en mi cama de camping bajo el toldo en la playa de Tarfaya que me perdí el amanecer: ¡Ya se que no debería haber pasado!, que cuando uno se va a África, al desierto del Sahara, lo ultimo que se debe perder es la salida del sol sobre las dunas… Pero yo me lo perdí. Estaba durmiendo como un tronco; ¡que bien se dormía allí!.
Habíamos quedado a las nueve de la mañana para meternos en la playa de Ladam con los coches todos juntos y recorrer el centenar de kilómetros que tenia desde allí hasta El Marsa, mas al sur de El Ayoum. ¡En mala hora se me ocurrió reunirlos allí a todos!; había mas de cuarenta coches y mas de cien veraneantes expectantes por ver como me metía yo el primero en la playa con mi Peugeot 505, arranque, engrané la primera, aceleré, solté el embrague… ¡y me quedé enganchado en la arena a los pocos metros de la cuneta!!. “Me cago ennnn...”, maldije mientras buscaba las planchas y la pala en el maletero y oía decenas de “clicks” de cámaras de foto inmortalizando el desgraciado acontecimiento. “¡Treinta años conduciendo por las pistas mas apartadas del Sahara, todo un prestigio “conductorero” creado kilómetro a kilómetro de aventuras desérticas con esfuerzo, sudor y penas,¡y todo mi prestigio y solera echado a perder ahora, aquí, en esta puta playa dominguera, mecagoenla, agggg…!”, volví a maldecir para mis adentros. Tubo que ser Jose Luís, con su Toyota Land Cruiser, el que se apiadara de mi, me enganchara con una eslinga y me sacara de aquel agujero del infierno rápidamente con un despectivo tirón.





Permisos de publicación
- No puedes crear nuevos temas
- No puedes responder temas
- No puedes subir archivos adjuntos
- No puedes editar tus mensajes
-
Reglas del foro