A las 7,45 am salia del garaje con la moto y me encaminaba por la M 45 hacia la autovia del noreste. La temperatura era muy agradable y el sol salia creando un horizonte increible, de naranja fuerte, azul claro y oscuro, sobre el asfalto; El salpicadero de la moto, 130 km/h mantenidos, bien cubierto por la cupula y tapones en los oidos: un espectáculo el amanecer sobre la bicilindrica de cómodo asiento y escasas vibraciones, avanzando sin mas coches que las furgonetas de reparto.
Todo muy bien hasta la bajada a Medinaceli. Perdí temperatura en menos que canta un gallo. Iba suficientemente abrigado aunque al vestirme sabia que algo de frio pasaria, pero con la idea de que la temperatura subiria rapidamente a primeras horas de la mañana no me puse mas ropa para un rato como ese. Terminé tiritando, y pasado ese valle se calmó la tiritona y busque gasolinera para rellenar antes de adentrarme hacia Embid de Ariza.
Por las obras de la carretera que tenian cerrada la gasolinera que necesitaba para mi ruta, replanteé el plan y empecé por el final.
Nada más pasado el Estrecho, aparece el manantial de agua caliente que había dejado para el final del dia. Paro, todavia voy con frio aunque mejor, meto la mano y ... ¡que gusto, que caliente!
Asi que nada, quito los pulpos y al agua
Me coloque en el lado del sol por el frio del cuerpo, que no del ambiente, y al rato, tras posar para la camara y guardar el momento de cara al futuro, me relajé y estuve unos minutos entretenido con los abundantes peces. El Panda era de una pareja de mediana edad que andaban recogiendo de los arboles no se muy bien qué.
En esta foto se puede ver el agua transparente y limpia que corre y ¡ los peces !
Asi que nada, toalla, vestirse y quitar las mallas y camiseta termica y a proseguir con la ruta.
Pasear sobre asfalto o tierra despacio, y disfrutando de paradas abundantes y tomar fotografias de cosas del campo, de esas que me gustan y me llaman la atención.
Hoy no hubo tiempo para pasear, pero ¡qué ganas! ¡Como me gusta el campo y mas esta zona. Entrañable.
Pueblos de España:
Saqué la merienda que llevaba y me la comi en lo alto. Me sentó la comida de perlas.
Tras recoger, cargué y puse rumbo a Madrid de nuevo, si bien cambié de terreno en un principio
Y si, me animé con unos caminos a unas horas en las que el calor empezaba a apretar, aunque no es algo que a mi me moleste en exceso. Me gustan mucho estos montes.
Montes
Sombras frescas
Mi burra
Y tras llegar al pueblo previsto, elegí volver por carreteras secundarias hasta Medinaceli
Esta ultima foto corresponde a un lugar en el que cumbreas y encuentras esta depresion con una recta que, con la vida que le da el movimiento de los molinos a ambos lados, y la profundidad de la vista, te hace sentir una sensacion de libertad bonita, bonita.
Y no todo este tramo de carreteras es asi de abierto, pues la primera zona es de bosque, no de pino, sino de roble, de haya, encina....
Y el resto del camino autovia hasta Madrid, aburrida a plena luz del dia pero muy eficaz para trasladarte en el menor tiempo.
Ya tengo prevista una visita mas por las cercanias de otra sierra y una cascada. Tiempo al tiempo aunque no se si las mañanas aguantaran estas buenas temperaturas para viajar o habra que dejarlo para la primavera. Ya veremos.