Capitulo 5: " Esos no son los androides que buscais.... "

Nos vamos despertando poco a poco. Hace frio, pero se agradece. Algunos pilotos se alejan para dejar lo mejor de si mismos en la arena. Otros preparan algo de desayunar.







Las cosas se ven de otra forma ahora. Que vengan las dunas, los cherifes y los calores que quieran. Nosotros valemos pa eso y pa más!

Recogemos las cosas y ya pertrechados, nos vamos a pasar las "bad dunes". Todo bien, sin complicaciones (salvo una pequeña subidilla para la 990, pero ná grave) y continuamos pista hacia el lago maider. Alli nos tomamos unas cocacolas en el albergue, hablamos con el propietario y seguimos camino hasta Zagora.













Empieza ya a apretar el calor y los ultimos kilometros hasta Zagora los hacemos por una pista de 8 carriles, por lo menos. Sacamos una media "asustante", casi mas que en muchos tramos de carretera buena....


Por fin llegamos a Zagora; paramos a comer en un chiringo, y ya con la tripa llena, buscamos hotel. Encontramos uno correcto, con piscina y cerveza......



Dejamos los trastos, nos duchamos (agua fria por fuera, y cerveza mas fria por dentro) y nos vamos a dar una vuelta.

Manu desaparece misteriosamente y aparece metamorfoseado en motero local, casco incluido:


Hacemos algunas compras y cenamos tranquilamente. Me gusta el ambiente de la ciudad: parece própera y con clase.




Capitulo 6: " ¿.. de qué tienes miedo? - de ser olvidada "

nos levantamos temprano, desayunamos bien y tiramos hacia las gargantas. Deshacemos un poco de pista del dia anterior para desviarnos al norte por otra pista. Nos adelantan unos italianos con monturas mas ligeras, y nos cruzamos con un 4X4 parado, que nos pide si por favor tenemos una bomba de aire. Ha pinchado dos veces, pero no lleva ninguna mas de repuesto, de forma que paramos y les ayudamos a llenar la que está montada, para que puedan continuar unos kilómetros mas.
El coche lo conduce un guía, que lleva a una familia de Sevilla que ha contratado las vacaciones por internet. El padre no sabe ni donde van a dormir esa noche (y creo que ni le importa), la madre se lo toma a guasa y los dos niños tienen una cara de flipe que no sé si están en estado de shock o avergonzados por el progenitor....



La cosa es que de una forma u otra, llegaran a Zagora, porque no son muchos kilómetros y Ali el gordito tiene a sus chicos cerca.

Continuamos camino por la pista que nos lleva al norte, atravesando parajes solitarios y secos.



Llegamos a la carretera y subimos hacia la garganta del todrá. Continuamos hacia el norte y paramos a dormir en un hotel ( bueno, sí, me he pasado. Un edificio donde alquilan habitaciones si vas a preguntar)



Dormimos algunos en los sacos encima de la cama, otros valientes se meten dentro. PEro la cosa era dormir, cenar y desayunar correctamente, y lo hicimos por 15 euros.
Aqui una foto del pedazo de cuscus que nos hizo el chico que regentaba el "alojamiento". Y para cenar. Ole, ole, y ole.



Epilogo.....


Al dia siguiente cogemos la pista que une las dos gargantas. Hace frio al principio, se sube muy alto. Luego, mas abajo está todo lleno de piedras y mas piedras. Solamente al final la pista se transforma en una pista de grava y mas tarde, de asfalto. La pista acaba y llegamos al puerto. El toubkal está cerca..
Bajamos el puerto, todos en reserva durante kilómetros. Menos mal que era cuesta abajo, porque creo que reposté con menos de un litro en el depósito......








Se me olvidaba! fuimos a Ait benadou, donde hicimos noche. La verdad es que ahora no me acuerdo ni donde cenamos....




Nuestra idea no es llegar a marrakech, sino subir por el interior, dejando las montañas a la derecha y pasar por Azrou, Kenifra y Meknés.
Estamos en modo vuelta, con ganas de que nos cundan los kilómetros y de no perder el ferry, así que este dia y el siguiente pasan sin mayores alegrías.

Pasamos a ver unas cataratas:



Dormimos en un hotel solitario y carísimo, pero era tarde y no había otra cosa.


Por la mañana salimos pitando, yo me tomo ibuprofeno para el dolor de espalda (la XT no pone de su parte para que se me pase...) y nos vamos hacia el norte, donde finalmente cogemos el ferry de vuelta. Volvemos alegres pero tristes; cansados pero con llenos de energía; nostálgicos pero deseando ver a nuestras familias.

Llegamos a Algeciras, donde el coche con el remolque sigue en su sitio en el hotel. Nos duchamos y cenamos tranquilos. Es sábado y nos vamos pronto a la cama. La idea es salir pronto por la mañana.

Y eso es todo. Buen viaje y en buena compañia. ¿se puede pedir más?