son sensaciones distintas y lo bueno es poder combinarlas. De esta forma además disfrutas de casi todo el amplio pastel motero, quedando fuera realmente poco.
Si además le puedes cambiar zapatos con la agilidad de tener dos juegos de llantas completas (no solo los aros, Joe) ya es la pera.
Un amigo tiene doble juego de llantas con su correspondiente arrastre y frenos para uso endurero ambos pero para aprovechar los neumaticos dependiendo de la zona, la ruta, clima, etc