Cogimos el ferry desde Trieste después de haber ido por el campo hasta allí desde Liubliana. Eran las 23h de la noche, exultantes subimos al barco y nos acomodamos donde pudimos para pasar las siguientes 34 horas. Como consejo para pasar las horas rápido, una botella de lo que sea ayuda... excepto si es de agua.
¿Y dónde está Albania? Esperarse...
A las 11h de la mañana llegamos a Igumenitsa. Cruzamos la frontera griega con Albania y la primera en la frente.
Un pinchazo con la válvula degollada. Montamos una cámara de 21 en la rueda de atrás de Roman y la cambiamos por una de 19 en el primer pueblo. Gyrocaster.
Ahora va surtido de fotos sobre el camino.
Esta es la vista desde un restaurante que conocía de una vez anterior. Hasta allí fuimos por asfalto.
Empieza el chou
Esto es lo que te encuentras por el camino mayormente. Piedras de todos los colores.
Cómo chuta el powercommander que me he puesto en la próstata.
Perdón, que se me va, a lo que íbamos
Esta me recuerda al desktop del windows pero con la hierba sin cortar y el cielo más bien nubladito.
También hicimos 16km por un cauce semiseco o semimojado, según se mire, que combinaba arena con piedras. Mi parte favorita del viaje.
Y otra vez para arriba.
Elbasan fue la única ciudad donde paramos. Normalmente hicimos noche en el campo y en tres ocasiones dormimos en hotel. Aquí aprovechamos para arreglar varias averías y seguir adelante.
Moñas
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