Paradoja.- Hoy pretendo visitar un lugar que ya no existe.
Fastidio.- Tomamos una pista conocida para hacer menos asfalto y nos topamos con esto:
Serenidad.- Un lento circular por la alameda Do Arnado en la villa de Allariz, deberia ser terapia
obligada. Es un chute de sosiego.
Luminoso.- Atravesamos el rio Arnoia por el puente medieval. Tras el cedro se eleva el monte
Penamá. Bordeo esta hermosa población para buscar su cima.
Deslizando.- Pisteando muy a gusto caracoleo sobre arena y piedras. Alcanzo al fin la cumbre
y me entretengo mirando el horizonte.
Radiación.- Breve descanso. Algo incómodo por tanta antena pruebo a descender por otra vertiente.
Devociones.- Tras dejar huella y algún susto por una fea pista, nos recibe la guapa morada de
San Bieito da Uceira.
Llanura.- Le agradezco al santo el no sacarle el ojo de encima a la Honda. Descendiendo diviso
la torre de Sandiás, ya nombrada en tiempos de los Suevos. No me acerqué a ella pero en una foto
de la red llama la atención el grosor de sus muros. Detrás, Antela, una planicie con poco mas de
cincuenta años.
Espejismo.- En realidad debería de ver esto...
... lo pone en los mapas de mitad del siglo pasado...
... y los vuelos de las avionetas lo corroboraban...
... pero lo que aparece delante de nosotros es:
Desecación.- Estamos hablando de una laguna de 6 km de ancho por 7 km de largo. Con una
profundidad media de 60 cm, estos 42 km2 de agua tenían 32 km de perímetro: La mayor de la
península ibérica.
Tras varios intentos en 1959 comenzó el drenaje y vaciado de una de las mas importantes santuarios
biológicos de Europa. Se justificó por la salubridad de la población y por generar una gran superficie
de cultivo.
Paso por la compuerta del canal principal de desagüe y evoco las cicatrices.
Humorista.- Camino de la atalya de A Pena noto que la pantalla del movil se ilumina. Me detengo
saco con celeridad los guantes abro el casco y contesto metiendo el teléfono entre el acolchado y la
mejilla. Es mi chica con unos recados "me saco unos selfies ya verás que manos libres he descubierto"
le digo...
... y acabada la conversación noto que me falta un guante y no aparece por ningún lado. Me dispongo
a bajar de la moto y miro el display de la cámara para apagarla: ¡¡ Ya encontré el guante !! Me rio
solo y con ganas.... sin comentarios.
Fracaso.- Estamos al pié de la fortificación. Solo queda la torre del homenaje bién conservada.
A 750 m de altura estamos en un buen oteadero.
Tras la desecación surgió lo evidente:
- Las tierras se vendieron a los pocos que tenian mucho dinero.
-La tierra seca y arcillosa, sin humedad ni materia orgánica perdió su fertilidad.
-Las gentes seguian con las enfermedades propias de la pobreza, mala nutrición y falta de medicinas.
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Iniciado por gon
. Olvidé comentar en la crónica que existe un interesante museo con la historia de la zona en Vilar de Santos 
