Bueno, como habéis pedido que amplíe mi intervención, pues lo intento:
Lo primero, no digo que no me hayan gustado, sino que simplemente son motos que no cubren mis necesidades o expectativas. Como se dice siempre de forma acertada, no hay moto mala, sino compra equivocada, y en mi caso, fueron compras equivocadas. Bueno, una más que la otra, en realidad.
La TE630 la compré en 2012, y nada más estrenarla empecé con problemas y más problemas. Se quito la sonda lamda, se cambió el CDI, la bomba de la gasolina, no se que sensores de temperatura, la leche, la moto se aceleraba a veces y otras se paraba, el ralentí oscilaba entre 1.600 rpm y 1.900 rpm, que es mucho oscilar, etc. Todo esto hizo que durante los primeros 6 meses la moto estuviera en mi garaje ni la mitad del tiempo. Al final, después de mucho cambiar piezas y probar y probar (un tío desde Gerona con un ordenador se conectaba a la moto, subrealista), quedó bien, pero ya la ilusión de la moto nueva se había convertido en un agobio y casi que directamente le pillé manía a la moto. Aún así, aún la pude disfrutar unos meses y hacer 10-12 salidas con ella por campo y alguna por carretera. Análisis: la moto de motor muy bien, corre lo suficiente tanto por campo como por carretera, es suave, retiene, un poco larga de desarrollo pero se acorta. Suspensiones justitas: cumplen para ir en plan paseo pero si te calientas un poquito ya no son tan efectivas. Asiento cómodo para un rato, y un poco más, pero no tanto como para viajar. Freno delantero bastante bueno y trasero aceptable. Lo peor el chasis. La moto, si le exiges, tanto en carretera, como en campo, se descompone, no es estable, no te da confianza. Es solo un fealing, pero lo notas. No te dan ganas de enchufar más. No se explicarlo mejor. Consumo entre 6 y 6,5 litros.
La 690 (tuve dos, una del 2009 y otra de 2014, pero hablo de la segunda que es la gemela de la 690). Motor: Uff, difícil. por encima de 3.500 rpm la moto de campo que más corre de todas las que yo he probado. Con escape abierto, posición 2 de ruleta, filtro abierto, una locura para habernos matado, peeeero, a pocas revoluciones corre menos que una DRZ limitada, vamos que los bajos son muy flojos. No retiene nada, lo cual en campo es un problema. Suspensiones: Durillas de más, de cansan los brazos, pero van muy bien, mucho mejor cuanto mas rápido pasas por una zona. Frenos: Impresionantes, con el ABS delantero no hay moto de campo que frene más que esta y con más seguridad. Chasis: Es KTM, es decir, moto nerviosa por genes y se comporta como tal, pero no es un defecto, es que son así, para lo bueno y lo malo. Asiento incómodo. Posición de conducción muy sport. Consumo de 5 litros, incluso menos.

La comparación entra ambas motos, es que la Husqui va muy bien para ir en plan paseo y enlaces por carretera de distancia media, pero no puedes ir rápido, ni por campo, ni por carretera, porque la moto no te acompaña. La KTM, lo contrario, es moto para ir todo el día enchufado, tienes que llevarla alta de vueltas para que corra y para que las suspensiones trabajen, para eso no hay moto mejor. En carretera muy poco agradable, vibra bastante y es incómoda de posición y de asiento, aunque yo he hecho tiradas de 300 kms con ella y no me quedaron secuelas vitales, je je. Ambas son muy pejigueras mecánicamente.. La KTM todo el día con el electroventilador enchufado a 100 grados, el rollo de los balancines. La Husqui ya he contado que se me rompió de todo.
¿Por qué no son para mi?: Porque moto para todo al final no es buena para nada. En campo difícil, si se complica la cosa son motos muy pesadas; la Husqui 10 kg más, pero en la KTM llegas peor al suelo, con lo que casi en trialeras, etc, es más complicada, además de que la falta de bajos aquí te penaliza mucho. Si vas a hacer campo complicado mucho mejor una enduro. Y si vas a hacer solo pistas fáciles, y enlaces por carretera, va mejor una trail ligerita, y si es veterana, tipo Africa Twin, DRBIG o así, mucho mejor.
En cuanto a la XR650R que tengo ahora, y que sustituí por la 690, pues creo que ya lo puse: Arranque a pata, no frena una mierda, suspensiones duras y anticuadas, consumo enorme, poca autonomía, vamos, un desastre, pero es la moto con la que más me he divertido de todas las que he tenido. El motor es impresionante, tira desde las 1000 rpm hasta las 6000 rpm como un salvaje, retención brutal (no usas los frenos, ni falta que hace). Fiabilidad impresionante: en dos años y 12.000 kms, solo cambiar aceite y limpiar el filtro de aire. Y el chasis más noble que he visto. Hagas lo que hagas nunca te va a dar un extraño. Te da mucha confianza. Es una moto anticuada, con muchos handicaps, pero me hace feliz. Eso si, es importante llevarla perfecta de carburación para que arranque a la primera patada o acabarás odiándola a muerte.