Que obsesión con meter superdeportivas en el campo tienen los yankees, es como ponerse un tanga de señora para que te queden colgando las pelotas a los lados. Y es que los que hemos tenido ese tipo de motos conocemos virtudes y limitaciones. Por ejemplo: la potencia es casi ilimitada, pero el radio de giro es ínfimo, el amortiguador de dirección ralentiza los giros a baja velocidad, las suspensiones no existen, el chasis no aguanta bromas y los neumáticos son muy anchos. Hace 70 años las motos no estaban tan especializadas y tenía sentido una scrambler, hoy es una aberración, aunque mola ver ese despilfarro de energía.