Día radiante con boira Anticiclónica y cambio de hora, cuando me doy cuenta veo que ya es tarde, me apresuro y en " un tres i no res " vestido de romano y depósito de gasofa casi lleno, arranco motores, mientras cojo los guantes, gafas de cros y el casco, cierro a cal i canto y pongo la ruta escogida en el Montana, la machine ya está lista para la acción.
Las pistas la gran mayoría largas y rectas como un tiro bala es la constante en un terreno llano, aunque las curvas también están presentes y hay que tener en cuenta la velocidad que se puede llegar a coger. La serra d'Almenara es la primera estribación de las muchas que hay que superar, aunque sin apenas dificultades.
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Superada la serra d'Almerara, en el lado norte continua una buena pista amplia que lleva hasta la población de Agramunt. En el horizonte a causa de la niebla anticiclónica se desdibuja la silueta de la serra del Cadí.
Después de Agramunt la siguiente cadena de lomas está muy próxima, a partir de aquí entramos en el pre-pirineo y las montañas se van a suceder una tras otra.
En el camino a Ribelles me cruzo con un edificio de larga solera, Castellblanc, muros sólidos de piedra aresnisca.
Mirando atrás en un toma elevada, se distingue la imponente silueta de la fortificación en contraste con la serra del Montsec.
En el camino voy encontrando infinidad de masías.
Al llegar a Santa Maria de Vilamajor para obligatoria, torreón amurallado con foso. Aaah del castillo!! bajen el puente levadizo.
Donde está el cartel de cuidado con los cocodrilos?........ Ah que los han cambiado por unos agradables patos, que chulo verlos retozar en el agua.
Continuo camino entre campos de siembra diversa, en primera línea Vilalta y al fondo cada vez con mejor visión y grande la sierra del Cadí.
Subiendo y bajando lomas, cada vez es más escabroso el subir y el bajar.
Llego a Ribelles. Lo escabroso del relieve no permite el paso por pistas en la dirección que tengo previsto, así que no queda otra que entonar la canción de McCartney " The long and winding road " para más tarde entrar en el territorio de les mil masíes, en cada cima hay una masía están por todos lados.
Y como no, ermitas en los sitios menos inesperados, ésta en Sallent, junto a una torre de vigilancia
Cartel de turismedesolsones.com
Después de pasar un buen rato entre el bosque de pinos y las escarpadas montañas de la zona alegra la vista y relaja la conducción después de kms de retorcida pista abrupta que obliga a ir de pie, con una pista amplia y llana, salvo los " clots " baches del tránsito de vehículos,
Antes de llegar a Ginestar tomo esta foto de la sierra del Cadí, para después enfilar dirección Solsona donde poner gasolina y 90 kilometritos de carretera de nada de vuelta a casa, se que me pierdo lo mejor, pero no hay más tiempo, otro día, más.
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