Un amigo me prestó uno durante un buen rato. És de esos que refrigeran por evaporación de agua, y por carretera no digo que vaya mal, todo lo contrario se nota el fresquito.
Pero a la que te metes en faena en caminos donde hay que “trabajar” aún daba más calor, pues añades capas de material plástico al cuerpo.
Cuando salimos de endurito, ya no lo usa...