Hola nois:


Hasta hoy no había leído éste "precioso" post... la verdad Travesero es que el contenido tanto literario como visual són una gozada...
En cuanto a los pajaritos esos... son... fantásticos...
Aquí en Catalunya hay algunos comederos de esos... mi hijo mayor el "ecologeta" siempre me dice que cuando muera quiere que lo llevemos allí para alimentar a los susodichos...
No se porque nos inducen ese contradictorio sentimiento entre la facinación por su tamaño, por su extraordinaria forma de volar, la elegancia en el aire que contrasta con su aspecto tosco y desgarbado en el suelo, y la repulsión por el hecho de ser carroñeros...
La humanidad siempre lo ha sido... últimamente no comemos la carne cruda, pero eso es sólo desde antes de ayer...

gracias...

V'ssssssssss