¡Vaya putada! Acabo de volver de vacaciones y me encuentro con este culebrón (de los de miedo)
La verdad LuiXT es que hasta que no te ves en una situación de estas uno no sabe como va a responder.
Lo de la GC de verguenza, casi habría sido bueno contratar un notario que diese fe de su negativa a acudir en tu auxilio, y luego exigir responsabilidades...
Quedemonos con que la historia tiene un final feliz (o casi) y puedes volver a rodar en tu moto.
Saludos y animos.