Lamento comunicar, fieles esbirros, que el día en que consigua concluir el relato de este capitulo de mi desdichada existencia, queda aun lejos, en la londananza.
Espero culminar satisfactoriamente esta azaña, y agradezco el voto de confianza de quienes se han encontrado alguna vez en mis misma tesitura.
Sin mas preambulos me despido hasta la proxima.
Paciencia y tesón.