Como se suele decir: “Dale un silbato a un tonto y se creerá un general”.
Típico caso como el del fracasado que se mete a policía local sólo para mandar, imponer “su” autoridad y reprimir al personal. Y no deja de ser un mierda.
¡Ojo! No digo todos, que los hay cojonudos, pero sé de algunos casos de buena tinta por mi zona.