_Editado: Antes de nada quisiera pedir perdón a mi amigo por haber subido algunas fotos en las que él aparecía sin su permiso. Ya han sido retiradas.
También os pido disculpas a todos vosotros.
De todas maneras he decidido seguir manteniendo la crónica. Visitamos parajes que creo que merece la pena que conozcáis_
El martes 10 coincidimos de día libre mi amigo y yo.
La cosa estaba clara: ¡MOTO! y en cuanto al destino los dos estuvimos de acuerdo: El Parque Natural y Reserva de la Biosfera de Somiedo, en Asturias. A menos de 100 km de casa.
Tras repostar en Villablino, pasar por la Leonesa comarca de Babia y descendiendo el Puerto de Somiedo, nos encontramos con La Peral. Donde ya se aprecia el valle que atraviesa la comarca y por el que discurre el río Somiedo
Girándonos a la izquierda vemos el pueblo.
En Pola de Somiedo visitamos La oficina de Turismo.
Viendo los paneles informativos nos hacemos una pequeña idea de las maravillas de la zona.
El camping está en el mismo pueblo. En un plis aligeramos las motos, montamos la tienda y salimos pitando. Hay poco tiempo y mucho que ver.
Nos acercamos hasta Valle del Lago. Desde el que se puede ir a pie al Lago del Valle. El más grande de los muchos lagos de la comarca.
El parque tiene autorizado el uso de vehículos a motor sólo en las principales carreteras que unen los pueblos. Todas las pistas que nos encontramos (salvo una) y casi todos los accesos a los pueblecitos más pequeños están restringidos.
El hambre aprieta y paramos en Veigas. Muy buena comida y a buen precio. Ensalada de la tierra, escalopines al cabrales, requesón... (la sidrina la dejamos para la cena) Esto es el paraiso.
Valle arriba nos encontramos con la única pista transitable para vehículos a motor del parque (según nos informaron en La Pola)
Continuamos subiendo hasta el Alto de La Farrapona. Las vistas de el Valle de Saliencia, de origen glaciar se tornan espectaculares
Sobre el manillar de la domi se aprecia el Lago de la Cueva
Después de bajar La farrapona y sin dejar la pista nos volvemos a adentrar en tierras leonesas.
En Torrestío nos encontramos bonitos hórreos y curiosas señales...
La vuelta, por la misma pista por donde hemos venido no deja de ser menos espectacular.
Una paradita antes de hacer la subida a la Farrapona por el lado leonés.
¡Amos pa yá!
Están arreglando la pista que va a el lago. Hay varias excavadoras y circulan camiomes.
El ruido de nuestros motores queda callado con el estruendo de las máquinas. No creo que molestemos mucho, así que, después de alguna deliberación y a pesar del cartel de prohibición, decidimos bajar a el lago.
Cerca hay una explotación de hierro. Nos quedan los neumáticos "oxidados"
El Lago de la Cueva.
Asomándonos al mirador vemos el valle y la pista que nos ha traido hasta aquí. También se pueden apreciar algunas "cabanas de teito"
En la bajada tampoco nos podemos resistir a sacar unas fotos
Seguimos bajando ya por asfalto y un pueblo nos llama la atención (no recuerdo el nombre). Decidimos entrar a curiosear.
Paramos frente a este magnífico hórreo.
Cuando estábamos comentando los usos de los distintos aperos y utensilios que decoran el hórreo, se nos acerca un lugareño muy simpático apodado "el súper" que nos ayuda en nuestras deliberaciones, nos invita a su casa y nos muestra su particular "monumento a la mina"
Un mango de navaja hecho de cornamenta.
¡un abrazo súper!
Seguimos nuestro camino recorriendo preciosos parajes
Bajo una incipiente lluvia que al final se quedó sólo en amenaza, visitamos el pueblo de Villar de Vildas.
Aunque se hace tarde y hay que volver, el cartel de "10 km al Puerto de san Lorenzo" es demasiado tentador.
En cinco minutos la niebla se nos echa encima. Esto es la montaña. Nos ponemos el forro y "pa bajo"
Ya en el camping, ducha reparadora, ropa de paisano...
¡a cenar y que corra la sidra!
Un día muy aprovechado.
El miércoles muy prontito desmontamos el campamento.
Desayunamos como los campeones, nos sacamos unas fotitos cachondas
Y pa casita, que a las 2 hay que currar.
Espero que os haya gustado
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