Me alegro mucho de que Merche no se haya hecho nada al final, aparte de los daños en el amor propio, porque la última caída pintaba mal.
La Dakar pesa como un demonio, qué os voy a explicar, no es fácil aguantar las inercias de casi 200 kg en montaña para una mujer ya no te digo si el terreno está muy embarrado o con piedra suelta, por mucha preparación física que hagas jamás tendrás la fuerza de un hombre, pero al final con maña y práctica y un poco de ser consciente de tus límites, llegas hasta donde quieras.
Que no se desanime, ¿OK?, anímala tú todo lo que puedas, el secreto está en coger la moto y hacer kilómetros y más kilómetros por carretera y montaña.